"Ojalá y me hubiera quedado yo allí en vez de ellos"

Manuel Espadas
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El acusado de haber provocado la muerte de tres jóvenes en Argamasilla pide perdón en la última sesión del juicio: "Me arrepiento de lo que hice cada día de mi vida"

El acusado, emocionado durante la última sesión del juicio. - Foto: Rueda Villaverde

Esta mañana ha finalizado en la Audiencia Provincial de Ciudad Real el juicio con jurado popular contra el joven que provocó el grave accidente de Argamasilla de Alba, que le costaba la vida a tres jóvenes de la localidad y hería de gravedad a otros tres. En esta última sesión, David C. L. pedía perdón a las familias de las víctimas y, entre lágrimas, expresaba de manera pública su deseo de haber fallecido él en el accidente en vez los ocupantes del otro vehículo. "Ojalá y pudiera cambiarme por ellos, ojalá me hubiera quedado yo allí en vez de ellos", confesaba entre sollozos, asegurando que se arrepiente de lo que pasó "todos los días de mi vida".

A preguntas del fiscal, el acusado explicó que aquella noche de junio de 2021 aceleró su BMW hasta los 94 kms por hora en la calle Encuentros para "hacerme el interesante" delante de su acompañante, Lorena, una chica de la localidad con la que, según él, había empezado una relación esa misma noche en un pub del municipio. Subrayó que desconocía que en la calle Encuentros la velocidad estuviera limitada a 30 kms por hora ni la existencia de un ceda el paso, y que su acompañante en ningún momento se lo advirtió. "No me dio tiempo a reaccionar ni a frenar", ha explicado ante el tribunal David C. L., que ese fin de semana estaba en Argamasilla de Alba por el cumpleaños de su hermano, que sí residía allí con su madre (él es vecino de Montehermoso, en la provincia de Cáceres). En su declaración confesó haber tomado ese día "dos copas" y haber esnifado cocaína, aunque negaba haber consumido éxtasis, pese a que así lo delataron los resultados de los análisis toxicológicos a los que fue sometido. También desmintió que su reacción de acelerar el coche fuera provocada por su enfado cuando Lorena le advirtió que se quería ir a su casa, tras preguntarle él si era virgen, como así declaró ella. Y tras el impacto, él justifica las incoherencias que hizo o dijo porque "la cabeza se me había ido".

Antes que él hablaba ante el tribunal su madre, quien no podía evitar las lágrimas al pedir perdón a las familias de las víctimas: "Lo siento mucho", dijo visiblemente afectada, con su hijo a un lado también con lágrimas en los ojos y tapándose la cara con la mano.

La madre de una de las víctimas luce una camiseta con la imagen de su hija fallecida.La madre de una de las víctimas luce una camiseta con la imagen de su hija fallecida. - Foto: Rueda Villaverde

El joven extremeño, a preguntas de su abogada defensora, explicaba que durante los casi dos años que ha estado en prisión preventiva ha intentado autolesionarse varias veces, y que ha asistido de manera voluntaria a un programa de desintoxicación de alcohol y drogas y se ha puesto en manos del psicólogo: "No podía aguantar todo lo que tenía sobre mí".

 

Conclusiones y veredicto

Asistentes en la sala de vistas de la Audiencia Provincial.Asistentes en la sala de vistas de la Audiencia Provincial. - Foto: Rueda Villaverde

Tras las palabras del acusado, la sesión finalizaba con las conclusiones de todas las partes, que no variaban con respecto a sus planteamientos iniciales y lo escuchado durante estas cuatro sesiones del juicio. Fiscalía solicita 5 años y 10 meses de cárcel por tres delitos de homicidio por imprudencia grave y otros tres de lesiones por el mismo motivo. El acusado realizó "una conducta imprudente de extraordinaria gravedad", decía Jesús Gassent, pero descartando que su objetivo fuera matar a esas personas. Sin embargo, la acusación particular que representa a las familias de los tres fallecidos eleva esa petición de pena a los 15 años por tres delitos de homicidio doloso. "Tenía un consciente desprecio por la vida de los demás", subrayaba la letrada Maite Parejo, que añadía que "él conocía el riesgo y las consecuencias" de su conducta. Por su parte, la defensa, Gema Pozuelo, sostenía que lo que sucedió aquella noche fue "un terrible accidente" y que su cliente "no quería causar daño", aunque lo hiciera por conducir de manera temeraria, pero fue "algo momentáneo". Las indemnizaciones superarán el medio millón de euros.

El acusado se seca las lágrimas durante la sesión de este jueves.
El acusado se seca las lágrimas durante la sesión de este jueves. - Foto: Rueda Villaverde

Los miembros del jurado popular tendrán el objeto del veredicto en sus manos mañana viernes, y ellos deberán decidir de qué tipo de delitos es culpable David C. L., tras lo cual, la magistrada presidenta del tribunal, Pilar Astray, firmará la sentencia con las penas a cumplir.