La lectura, las matemáticas y las ciencias no parecen ser el fuerte de la mayoría de los alumnos españoles de cuarto de Primaria. Así al menos se desprende de las pruebas educativas PIRLS y TIMSS, realizadas en 2011 por la International Association for the Evaluation of Educational Achievement (IEA), en 48 y 63 países, y dadas a conocer ayer. En ellas se concluye que los escolares nacionales se sitúan por debajo de la media de la OCDEy la UE en dichas materias.
Así, en lectura, España obtiene 513 puntos, por encima de la referencia de los 48 Estados estudiados, que se sitúa en los 500 puntos, pero por debajo de los 25 territorios que pertenecen a la OCDE (538 puntos) y los de la UE (534).
Las puntuaciones más altas son las obtenidas por Hong Kong (571), la Federación Rusa (568) y Finlandia (568). Los resultados de PIRLS-Lectura señalan que el porcentaje de alumnos excelentes de España (4 por ciento) es inferior al de la OCDE (10 por ciento) y que la proporción de escolares rezagados (6 por ciento) es superior a la de la OCDE (3 por ciento).
Por su parte, en Matemáticas, España ha obtenido 482 puntos y, por tanto, se posiciona por debajo del promedio de los 63 países de 500 puntos, y es inferior también de la media de la OCDE (522) y de la UE (519). Los resultados más elevados los han obtenido Hong Kong (602), Irlanda del Norte (562) o la comunidad flamenca de Bélgica (549). La proporción de alumnos rezagados en España en matemáticas es del 13 por ciento frente al 7 por ciento de la OCDE. Y los escolares excelentes solo son el 1 por ciento, por debajo del cinco por ciento de la OCDE.
En Ciencias, los alumnos nacionales están un poco mejor, al obtener 505 puntos, por encima de la media internacional de 500 puntos, pero por debajo de la OCDE (523) y la UE (521). Los Estados con más alto rendimiento en Ciencias son Finlandia (570) o la Federación Rusa (552).
España tiene un 8 por ciento de alumnos rezagados en Ciencias frente al 6 por ciento de la OCDE. La proporción de estudiantes excelentes en esta materia en el país es del 4 por ciento, mientras que en la OCDE es del 7. No obstante, es la asignatura en que menos alejada está España tanto de alumnos rezagados y excelentes con respecto a la OCDE.
Bajo rendimiento. El informe internacional indica que existen varios aspectos que determinan el rendimiento y, en el caso de España, hay dos que se sitúan muy por debajo de la media mundial: el énfasis en el éxito académico o las buenas notas y el interés en las clases.
Según los profesores, España tiene un 19 por ciento de escolares que no muestran interés en el aula, una cifra que casi duplica a la media internacional, que se coloca en el 10 por ciento. Los centros nacionales en los que hay mayor proporción de alumnos desmotivados alcanzan una puntuación de 487 puntos en la prueba de Lectura, que contrasta con los 519 de media del resto.
El informe destaca también que es el país donde menos influye el nivel socio-económico familiar en el rendimiento de los alumnos. Así, pone como ejemplo que los hijos de padres con grado universitario obtienen 55 puntos más que los que sus progenitores solo tienen estudios obligatorios, una diferencia que en la media de los países de la OCDE alcanza los 80 puntos.
Sobre este aspecto, el profesor José-García Montalvo, de la Universidad Pompeu Fabra, señala que la «sobrecualificación» que existe en nuestro país puede estar detrás del menor efecto que tiene la educación de los padres en los resultados académicos.
Otro de los datos reseñables del informe es que España es uno de los países donde menos diferencias existen entre colegios. No obstante, el documento precisa que los centros privados y concertados obtienen resultados superiores a los públicos, no porque sean mejores, sino porque sus estudiantes proceden de entornos socio-económicos más favorecidos.