Valdepeñas siente admiración por el Maestro Luis Ibáñez Fernández. Nació en Sigüenza (Guadalajara) y con 26 años se instaló en la Ciudad del Vino, donde su pasión por la música le lleva a fundar en el año 1922 la Agrupación Musical La Lira, y años más tarde la Rondalla de Educación y Descanso y la Coral de Voces Blancas, de la Sección Femenina. Un legado que hoy perdura a través de la Agrupación Musical, que en su honor, lleva su mismo nombre y que desde que vio la luz en 1907 ha ostentado varios nombres y ha pasado por varias reconversiones estatutarias. Pero lo que no han cambiado han sido las ganas de disfrutar y propagar la cultura musical. Sin duda, una agrupación centenaria de gran calidad musical y humana.
Sus participaciones son muy diversas, desde conciertos, pasacalles y dianas hasta procesiones, eventos taurinos, desfiles y «todo aquello en lo que se nos requiere». «Estamos al servicio de la ciudad valdepeñera», comenta el presidente de la junta directiva de la Agrupación Musical Maestro Ibáñez, Agustín Cámara. «No somos banda municipal, pero tenemos una relación muy estrecha con el Ayuntamiento de Valdepeñas», comenta Cámara, quien recuerda que durante mucho tiempo la agrupación fue banda municipal.
Los conciertos anuales también forman parte de su agenda. Así, cuando llega la Semana Santa, ofrecen un concierto cofrade, aunque cuando llega la época estival y la Navidad tampoco faltan sus tradicionales conciertos. Ahora, la agrupación tiene la mirada puesta en el próximo 19 de octubre, fecha en la que se celebrará, en el Auditorio de Valdepeñas, un encuentro de bandas con la participación de la de Alcázar de San Juan y la de Ocaña (Toledo), aunque en el calendario también estuvo marcado en rojo noviembre, mes en el que se homenajea a Santa Cecilia, patrona de los músicos, y en el que la agrupación toca para los valdepeñeros.
Más de cien años de buena sintonía
Entre 40 y 45 músicos conforman esta agrupación que cuenta con una sección juvenil y con una cantera de unos 50 alumnos, quienes de forma gratuita se están iniciando en el mundo de la música gracias a la escuela de formación que tiene la agrupación, dirigida por Verónica Sánchez Ramos. Son 'los educandos de la banda'. Una escuela que se mantiene, reconoce Cámara, por el apoyo económico del Ayuntamiento valdepeñero, que «nos permite tener este servicio de enseñanza de carácter profesional para todo el que quiera aprender música». «Nos dedicamos a formar músicos para la banda. Aquella persona que aprende adquiere el compromiso de formar parte de ella. Los músicos no se forman de un día para otro, por lo que tenemos que tener siempre preparada una cantera», declara Cámara para recordar después que uno de los momentos más emotivos que ha vivido la banda en los últimos días fue el pasado 8 de septiembre, cuando bajo el escenario de las fiestas patronales, tocó el himno de la Virgen de la Consolación frente la recién inaugurada escultura del Maestro Ibáñez, compositor del himno a la Virgen. «Ha sido un momento muy especial», enfatizó.
Cámara lleva aproximadamente año y medio presidiendo esta agrupación, que hace dos años consiguió la mención de honor en el Certamen de Bandas de Mota del Cuervo (Cuenca), «un hito muy importante para nosotros, que llegó con el que entonces era nuestro director Carlos Ramos».
Tras hacer un balance «positivo» de su tiempo frente a la presidencia, aseguró en declaraciones a La Tribuna, que uno de sus principales retos para su mandato será potenciar la escuela ante la escasez de músicos, pues «dar un servicio musical al pueblo es una actividad con un carácter social, artístico y de buena convivencia».