El Plan Integral de Accesibilidad de Ciudad Real recoge un importante paquete de medidas a desarrollar en un plazo de seis años, con un presupuesto base que roza los cuatro millones de euros. Así se desprende de la memoria general de esta ambiciosa y transversal iniciativa municipal, que fue aprobada en Junta de Gobierno Local el pasado 25 de marzo.
El Ayuntamiento pretende hacer accesible el entorno, los productos, bienes y servicios existentes de forma gradual, con el fin de que «todas las personas lo puedan utilizar con libertad y autonomía». El documento evalúa el nivel de accesibilidad que existe en un espacio territorial, define las actuaciones necesarias para adaptarlo, las valora, prioriza y propone un plan estratégico de etapas para su ejecución.
El Consistorio actuará en calles, plazas y jardines, en edificios públicos y en el transporte siguiendo un cronograma basado en el carácter prioritario de las medidas a adoptar. Entre las actuaciones con una prioridad alta, las más acuciantes, se encuentran la ejecución de rebajes adecuados en los pasos de peatones de los itinerarios principales, nuevas aceras en los tramos donde no existen, la ampliación de las aceras que no tienen una anchura mínima de 1,80 metros libre de paso, y la adaptación y nivelación del vial a condiciones óptimas de accesibilidad, mediante rampas o escaleras accesibles.
El Plan de Accesibilidad invertirá 3,9 millones en seis añosEn edificios públicos tienen una prioridad alta las actuaciones imprescindibles para que puedan ser utilizados de manera autónoma por personas con dificultades de movilidad. El mercado municipal, el complejo Playas del Vicario, el Ayuntamiento, el auditorio La Granja y los pabellones Juan Carlos I y Puerta de Santa María aglutinan las inversiones más elevadas, que suman algo más de un millón de euros. La construcción de rebajes de aceras para plazas de movilidad reducida es la actuación preferente en materia de transporte, un ámbito en el que el Consistorio también acometerá el repintando de las plazas ya existentes y la colocación de señalización vertical de prohibido aparcamiento.
Cabe destacar, finalmente, la inclusión en la cadena de la accesibilidad de las personas de diversidad funcional en todos los proyectos, programas y planes que se desarrollen en la localidad; y la implantación de nuevas tecnologÍas que ayuden no solo al entorno urbano y a la accesibilidad, sino también al turismo relacionado estrechamente con las buenas prácticas descritas en el plan. «Son aspectos a desarrollar para que Ciudad Real alcance la accesibilidad plena y sea un referente en la materia», subrayan desde el Consistorio.