Es posible que muchos estudiantes estén aún con el bolígrafo en alto decidiendo qué marcan en la matrícula que les abrirá las puertas de la universidad el próximo año. Si es así, y si la duda que aún mantienen está relacionada con las salidas laborales de las titulaciones de sus sueños, el Ministerio de Educación ha hecho balance de cómo se ha comportado el mercado de trabajo con aquellos que se colocaron el birrete en los meses de mayo y junio de 2014, y aunque las cifras globales no son muy halagüeñas, el análisis particular hace que algunos grados destaquen por encima de otros. En el caso de la oferta educativa de la Universidad de Castilla-La Mancha en el Campus de Ciudad Real, hay una ganadora: Medicina, que premia los esfuerzos que supone acceder a la misma ante la alta demanda de estudiantes con una empleabilidad que supera el 92,1 por ciento, y también con la base de cotización salarial más alta. En el extremo contrario, dos grados con raigambre en el Campus: Derecho, que cuenta con la tasa de afiliación después de cuatro años más baja, poco más de la mitad de los que se graduaron entonces en todo el país; e Historia del Arte, donde la afiliación es ligeramente mejor pero los salarios son notablemente más bajos.
Siete titulaciones de las que la Universidad regional oferta en el Campus de Ciudad Real cuentan con una tasa de afiliación después de cuatro años de más de 80 por ciento. Es decir, que de todos aquellos alumnos que se graduaron en el año 2014 en esas enseñanzas, ocho de cada diez están trabajando y cotizando a la Seguridad Social por ello. En esas siete enseñanzas que sobresalen por encima del resto se encuentra la apuesta de la dirección de la UCLM para el Campus este año, el Grado de Enología, que en el presente alcanza una inserción laboral superior al 81 por ciento para todos aquellos titulados del año 2014. Es la que marca la frontera en ese 80 por ciento, y por encima de ella están buena parte del ramillete de ingenierías que se ofertan en Ciudad Real: Ingeniería Agrícola y Agroalimentaria (82,4%), Ingeniería Electrónica (83), Ingeniería Mecánica (83,7), Ingeniería Eléctrica (85,6) e Ingeniería Informática (90,9), hasta alcanzar la cumbre con Medicina (92,1). Por debajo, no llegan al 60 por ciento de afiliación cuatro años después de la graduación Derecho (54,7), Lenguas Modernas (55,2), Historia del Arte (55,3) e Historia (55,8).
Una de ellas es precisamente donde más baja es la base de cotización, lo que significa que, en circunstancias normales, también es más bajo el salario. Es Historia del Arte, con una base de cotización media de 16.708 euros anuales, según las cifras recopiladas por el Ministerio de Educación. Junto a ella, el Grado de Geografía y Ordenación del Territorio, recién reestructurado en la Facultad de Letras, con una base de cotización de 17.353 euros anuales. También quedan por debajo de los 20.000 euros Relaciones Laborales (18.840) e Historia (18.883). Medicina es, también en este caso, quien marca el tope por arriba en materia de salario, con una base de cotización cercana a los 35.000 euros anuales que no alcanza ninguna de las otras enseñanzas, ya que todas se quedan por debajo de los 30.000 euros. Sólo Ingeniería Informática (29.295 euros anuales) se acerca a esa cifra.