JAS es la empresa de mantenimiento de aeronaves con más antigüedad en España. En 2020 cumple 20 años con servicio de mantenimiento en línea y de desmantelamiento de aviones y en Ciudad Real han abierto una línea de «storage y de preservación», lo que implica un tratamiento para aquellos vuelos que van a estar en tierra durante las semanas de confinamiento. Esta joven ingeniera eléctrica y aeronáutica trabaja en JAS tras estar antes en otras compañías, siempre del sector aeronáutico.

Representan ustedes la cara amable de la crisis provocada en el sector por la crisis sanitaria. ¿Cuántos aviones tienen aparcados en el aeropuerto y cuál es la previsión que se maneja?

Este viernes había 17 aviones. La previsión es complicada decirlo, porque las expectativas son altas y la previsión es que lleguen unos 50 aviones de la mano de JAS. Actualmente todos los que hay han venido por nosotros en un conteo continuo de aviones.

¿Qué límite hay en el aeropuerto para recibir aviones durante el tiempo que dure la pandemia?

Es una decisión más del aeropuerto que nuestra, pero esta semana algunos responsables han señalado que hay capacidad de hasta 1.000 aviones, es uno de los aeropuertos más grandes.

¿Qué tipo de aviones son los que está viniendo a Ciudad Real?

Por ahora nuestros clientes, debido a la fidelidad que tienen con JAS, como son Vueling y Virgin. Se trata de aviones tanto de corto recorrido como el A320 de Vueling como otros, de los más grandes de la industria, como el 747 de Virgin. Vamos a tener todas las gamas porque JAS tiene capacidad para reparar la mayoría de las flotas.

¿Se ha tenido que ampliar plantilla para dar respuesta a esta demanda?

Estamos buscando personal y contamos con bastantes candidatos que queremos que sean de la zona.

¿Cuánta gente trabaja en el mantenimiento de estas aeronaves en el aeropuerto ahora mismo?

En Ciudad Real, hoy por hoy, aunque estamos ampliando la plantilla a diario, hay unas 25 personas asignadas.

¿Qué tipo de trabajadores se buscan?

Mecánicos de avión, ingenieros, certificadores… Se trata de dos tipos de persona: los que tienen certificado para los aviones y los que son mecánicos que aún no lo han conseguido pero realizan otro tipo de tareas.

¿A qué tipo trabajos se dedican?

Se certifican los trabajos en los aviones y hacemos un mantenimiento y luego tenemos unos almacenes muy grandes para almacenar motores, hacen inventarios, hacen un poco de todo lo que es el loop. Cuando un avión está en parada hay que realizar mantenimientos para que no haya corrosión y para que, cuando retome el servicio global, siga operativo. Son tareas en las que el cliente te dice cuánto tiempo van a estar parados y en función de ese tiempo, un mes, más de un mes, tres meses, un año, o más de un año, se realizan unas tareas u otras. Si es de más larga duración, hay que hacer unas tareas en profundidad y si es menos son más livianas. Mientras, los certificadores entran a realizar estas tareas de acuerdo a unos certificados de JAS, como el 145 que se llama, y el objetivo es que todo siga vivo y el avión esté en plenas condiciones.

La primera idea que les llevó a JAS a venir a Ciudad Real era la posibilidad de desmantelar los aviones. ¿Se va a seguir con esa línea de trabajo cuando pase este momento?

Es un servicio que ofrece JAS desde hace 20 años, desde su inicio. Ya tenemos algunos contratos cerrados y queremos incentivar esa vía en Ciudad Real porque el aeropuerto tiene las mejores condiciones para ello.

De hecho ya había un avión para desmantelar como el de Surinam...

Sí, ese avión va a ir a desmantelamiento y luego irán otros de los que ya iremos informando. Esto va de un día a otro.

¿Cuántos años de vida útil tiene de media un avión y qué porcentaje de la flota tendrá que desmantelarse en los próximos años? Lo digo como cifras de negocio a futuro...

Esta crisis ha acelerado la decisión de desmantelar ciertos aviones. Se calcula que las aerolíneas, por desgracia, van a paralizar su actividad y se ha decidido estratégicamente desguazar ciertos aviones antes de llegar a su vida útil. El mundo aeronáutico es uno de los más afectados y se prevé, se dice en los medios, que van a tener un 40 por ciento de su flota volando, por lo que un 60 por ciento de muchas va a estar parada hasta que se recuperen.

Parte de ese 60% que se quedará parado, ¿se desmantelará?

Se prevé un aumento de los desmantelamientos. En el desmantelamiento hay un negocio asociado, ya que los aviones más antiguos, sí les puede sacar un rendimiento, ya sea por partes o por el reciclaje del mismo.

El ejemplo al hablar de este tipo de actividades de mantenimiento es siempre Teruel, ¿tiene capacidad Ciudad Real para posicionarse como aeropuerto industrial de referencia con esta crisis?

Totalmente, y de hecho Ciudad Real lleva un periodo muy corto pero, con ayuda del COVID-19, se van a coger cifras que se parecen mucho a las de Teruel.

Además del ejemplo de Teruel, hay otros aeropuertos como Castellón, Jerez o Sevilla... todos quieren parte de la ‘tarta’ de este negocio. Aena cifraba en 400 los aviones parados en España y en más de 5.000 en toda Europa. ¿Hay ‘mercado’ para todos los aeropuertos?

Ya no es solo España porque en Europa hay muchos aeropuertos. Creo que para todos no va a haber bastantes pero es muy positivo que Ciudad Real se posicione como lo está haciendo ahora.

¿Qué ventajas puede ofrecer Ciudad Real dentro de este mercado?

Para mí tiene la conjugación perfecta como son las condiciones del aeropuerto: CRIA es una empresa y no es de AENA y es más flexible y nosotros, que con la experiencia de la ingeniería hacemos el mix perfecto para dar asistencia a la preservación y al desmantelamiento.

En cuanto se levanten las restricciones a la movilidad aérea, ¿cómo afrontará Ciudad Real el futuro? ¿Será un paso atrás para esta línea de negocio?

Habrá una disminución de aparcamiento de aviones, por supuesto, y, de hecho será algo positivo para la industria pero sin duda este tiempo va a asentar las bases de Ciudad Real, va a ser un antes y un después y se va a posicionar en el mapa como uno de los centros industriales de desmantelamiento y aparcamiento de aviones más importantes de Europa y va a ser positivo.

¿Cómo valora la situación en la que se encuentran las aerolíneas? ¿Qué futuro cree que le espera a la aviación?

Como operador creo que nos esperan dos años de reinventarnos porque ya no es solo que pase un año hasta que se vuelva a volar al 100%, sino que las consecuencias que se quedan a las empresas implican que no sabemos hasta qué punto las aerolíneas van a recuperar su estado precoronavirus. A nivel operador y aerolínea vamos a ver el cambio, quizá, en la subida de precios de billetes y quizá, aventurándome mucho, no va a haber tanto low cost. Pero es muy pronto para hablar del futuro.

¿Cómo va a ser la nueva normalidad para los pasajeros? ¿Habrá más seguridad y aspectos que cambiar dentro del avión?

Nosotros ya tomamos medidas respecto a protecciones, desinfectando constantemente nuestros vehículos, y las aerolíneas ya están saliendo noticias de que también lo hacen y habrá una mayor concienciación en esta nueva normalidad y habrá ciertas medidas que nos tengamos que acostumbrar, porque volar a muchos metros del suelo requiere ventilaciones, que ya se aplican, pero creo que va a ser muy seguro.