Las calles del centro de Ciudad Real cambiarán los bailes y canciones de grupos y orquestas de estos días por 'música' de hormigoneras y martillos neumáticos a principios de septiembre, cuando está previsto que den comienzo las obras de peatonalización. A finales de la semana pasada, en plenas fiestas, el concejal de Movilidad, Miguel Hervás, se reunió con los representantes de las empresas adjudicatarias, Decennial y Cotodisa, para establecer la hoja de ruta de unos trabajos que tendrían que estar acabados y justificados antes del 31 de diciembre del presente ejercicio.
En declaraciones a La Tribuna, el portavoz del equipo de Gobierno, Guillermo Arroyo, avanzó que los trabajos, si todo marcha según lo previsto, arrancarán a lo largo de la primera semana de septiembre. Los dos proyectos, con una ejecución prevista de ocho meses, se desarrollarán de forma simultánea «para intentar acortar los plazos y llegar a tiempo». Un objetivo que se antoja complicado y que, de no lograrlo, obligará al Ayuntamiento a solicitar una nueva prórroga a Bruselas para no perder los fondos subvencionados por la Unión Europea. «Una vez iniciadas las obras no debería haber problema», apostilla.
En este sentido, Arroyo recordó que la «inacción» del anterior Ejecutivo local provocó una demora en el proceso de licitación que, asimismo, llevó aparejado un incremento de los costes. El presupuesto final se estableció en 2,91 millones de euros, doblando prácticamente el inicial. En enero, el equipo de Gobierno llevó a pleno una modificación de créditos de 1,8 millones para este y otros fines.
Las obras de peatonalización sostenible del centro de la ciudad afectan a una decena de calles y plazas: Juan II, Postas, Alfonso X, Reyes, Paseo del Prado, Caballeros, Ciruela, plaza del Pilar, avenida del Rey Santo y el pasaje de la Pandorga. Estos proyectos cambiarán la fisonomía del centro de la capital manchega, de donde saldrán los coches, ampliándose aceras y arbolado. Se crearán también nuevas zonas de disfrute para las familias, como un parque infantil en el pasaje de la Pandorga con la avenida del Rey Santo, una zona que se modificará para que el entorno de la iglesia de San Ignacio tenga bancos. Con estos trabajos, la zona peatonal de la capital aumentará en 1,12 kilómetros lineales.
Comunicación. El Ayuntamiento de Ciudad Real intentará que las obras de peatonalización se desarrollen «con el menor perjuicio posible». El portavoz del equipo de Gobierno avanza que, en los próximos días, el Consistorio informará a los vecinos y establecimientos comerciales y hosteleros de las zonas afectadas y las alternativas abiertas en materia de movilidad. Aún queda por decidir qué pasará con las plazas de zona azul que se perderán con este proyecto.