Daimiel afronta una nueva edición de su Carnaval con ilusiones renovadas y un programa para todos los públicos en el que brillan las máscaras guarronas y las brujas, sus dos estandartes. «La pandemia marcó un antes y un después para una fiesta que cada vez va a más en cuanto a participación», afirma la concejala de Festejos, Alicia Loro, que apunta a la recuperación del 'Martes del Río' y la celebración al aire libre en la plaza de España, en el centro neurálgico de la localidad, como claves en el resurgimiento de un evento que es «un triunfo de todos».
La máscara guarrona es la figura más representativa del Carnaval de Daimiel. Un honor que este año recae en Manuel Rincón de la Flor. Su proclamación tendrá lugar esta noche, a las 21.00 horas, el Teatro Ayala, en una gala en la que también se entregarán los Premios Amigos del Carnaval. «El disfraz de máscara guarrona se improvisa, se utilizan cojines o almohadas para modificar la figura, se cambia la voz y se tapa cualquier parte del cuerpo que te pueda identificar para hacer la broma al vecino o al amigo que te encuentras por la calle», explica la concejala.
Para que esta tradición «tan nuestra» no se pierda, la delegación de Festejos, desde hace tres años, organiza charlas en los centros educativos de la localidad para dar a conocer ese simbolismo que llevó al Ayuntamiento Daimiel a reconocer, desde finales de los 90 y hasta la actualidad, a un representante anual del Carnaval con el nombre de 'Máscara Guarrona'. «Cada vez hay más niños pequeños disfrazados de máscaras guarronas y eso nos llena de alegría», enfatiza Alicia Loro.
Además del 'Martes del Río', con el paseo de las máscaras guarronas, el 17 de febrero es otro de los días marcados en rojo en el calendario. Por la mañana, a las 11.00 horas, darán comienzo las actividades y pasacalles del Día del Peque-Bruji, y por la tarde, a partir de las cinco, el Baile de la Bruja en la plaza de España, un evento que cada año congrega a más gente de pueblos cercanos. La fiesta continúa después en el pabellón.