Herencia ha vuelto a brillar este martes en su día grande de carnaval, el Martes de Ofertorio. La música, el colorido y la diversión compartieron protagonismo en una fiesta que este año contó con 31 grupos procedentes de localidades de Ciudad Real, Cuenca y Toledo. Unos 3.000 participantes unidos por el carnaval han puesto la nota musical y festiva a una celebración de Interés Turístico Nacional. 

El desfile arrancó pocos minutos después de las tres y media de la tarde tras celebrarse el pasacalles y el Ofertorio, una de las señas de identidad del carnaval herenciano. Las calles se engalanan para entrar a ofrecer por las ánimas benditas del purgatorio. Es el momento en el que las campanas de ánimas suenan por la calle Carrasco Alcalde para dar inicio al ofertorio, momento en el que las jinetas, que representan a cada uno de los gremios de la localidad, y una pareja de cada uno de los grupos carnavaleros, justo antes del inicio del desfile, entregan su ofrendas a favor de Manos Unidas para su compaña contra el hambre. Es una ofrenda para las ánimas. Tras el pendón de las ánimas, que presidió el pasacalles, el perlé, el personaje central en el carnaval de Herencia, y diferentes autoridades como el alcalde, Sergio García-Navas,  el subdelegado del Gobierno, David Broceño, y la consejera de de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, entre otros. Un desfile que tampoco se perdieron los vecinos, con sus sillas a pie de calle. Entre ellas, la de Berta Mora, que asegura que el carnaval es una cita indiscutible para el calendario de los herencianos, quienes recuerdan que el mayor logro de Don Carnal fue enmascararse de Fiesta de Ánimas, reinventarse para sobrevivir a la prohibición como fiesta del Ofertorio o de Ánimas. 

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