Daimiel acoge este fin de semana el II Congreso de Música Sacra y que bajo el 'Lema de Dios', contará con conferencias, un concierto y actividades para redescubrir el rico patrimonio musical y cultural de la iglesia, así como un ámbito de diálogo y creatividad para dar cabida a nuevas propuestas.
El Congreso arranca con la introducción a cargo de Prado Pérez de Madrid, cantante y música, e integrante de la Fundación Lola Velarde, una organización formada por personas a quienes su fe cristiana les mueve a un compromiso por la promoción humana integral a través de iniciativas de diversa índole en ámbitos como el educativo, cultural, laboral, sanitario, social y de cooperación al desarrollo, promovidas por ella misma o en apoyo de las desarrolladas por otras instituciones.
Tras ella será el turno de la primera de las conferencias, con el título 'El Sonido como medio hacia la Trascendencia'. El director de la Orquesta Filarmónica de Castilla-La Mancha, Francisco Antonio Moya, será el encargado de impartir esta clase, para abordar aspectos de la música sacra.
Daimiel reflexiona sobre 'La música de Dios'Tras una pausa, será el turno de Ignacio Yepes, director de orquesta, flautista y compositor, así como doctor en Ciencias de la Educación. Yepes, como músico ha dirigido a la Orquesta Filarmónica del Arte, de la agrupación coral Koiné Ensemble y director musical del grupo internacional Donaires Ensemble, además de haber dirigido las principales orquestas de España y ha sido director invitado habitual al frente de numerosas orquestas extranjeras. También ha estado al cargo de la Semana de Música Religiosa de Cuenca y director de las Veladas de Arte Sacro de Guadalajara, siendo premio Bravo de música de la Conferencia Episcopal Española. Yepes hablará sobre 'La Experiencia de Dios a través de la Música'.
El propio Yepes dirigirá un taller de oración polifónica, a las 16.30 horas, para cerrar el congreso a las 17.30.
A las 20 horas, habrá un concierto de órgano en la iglesia de Santa María, a cargo de María Ceballos, organista en una parroquia madrileña, donde acompaña la liturgia dominical y dirige un Coro de voces mixtas.