La Hermandas de Nuestro Jesús Nazareno y María Santísima del Amparo, siguiendo la línea de las hermandades procesionales que le precedían en esta accidentada Semana Santa de Ciudad Real, también tomaba la decisión de suspender la estación de penitencia prevista para la madrugada del Viernes Santo, después de consultar la previsión meteorológica con la Agencia Estatal de Meteorología, que le confirmaba una "situación de inestabilidad e incertidumbre meteorológica provocada por la borrasca Nelson", como reza el comunicado difundido por la hermandad.

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Por ello, la Junta de Gobierno de la Corporación, reunida con carácter extraordinario, decidía suspender la procesión con salida desde la Parroquia de San Pedro Apóstol e informaba a sus hermanos, fieles y devotos que a partir de las doce de la noche se realizaría en el interior del templo la meditación de las siete palabras pronunciadas por Jesús en la Cruz.