El Balonmano Caserío ofreció una auténtica exhibición en la pista del Agustinos Alicante, una de las revelaciones en este inicio de campeonato, y envió de paso un serio aviso al Burgos, líder de la categoría y que este domingo visita el Quijote Arena.
Le sentó muy bien el parón al conjunto entrenado por Santi Urdiales, que despachó por la vía rápida a un peligroso rival, comandado por Marcos Fis y José Andrés Torres, soberbios en ataque, y un trabajo colectivo que invita al optimismo. Los amarillos son cuartos en la tabla y ofrecen una sensación de cada vez mayor solidez, lo que unido a una tremenda pegada en ataque le hacen ser ahora mismo un bloque temible.
Comenzó bien el conjunto manchego, que con tres goles de Marcos Fis en poco más de 5 minutos cobró la primera renta importante (2-5). A partir de ahí el cuadro local subió su intensidad defensiva, dio la vuelta al marcador y provocó el primer tiempo muerto del técnico de los manchegos (9-8, m. 13). Juanpe Espinosa colocó el 10-8, pero los cambios, incluido el de la portería, entrando Óscar Ruiz por Santi Giovagnola, sentaron bien al Caserío, que dejó a su adversario doce minutos sin marcar, lo que aprovechó para conseguir un parcial de 0-6 (10-14, m. 26), con Torres y Marcos Fis como referencias ofensivas. La defensa de los manchegos provocó varias pérdidas de balón de los alicantinos, que no obstante supieron superar este bache para irse al descanso con 12-15. Una ventaja que se antojaba algo corta visto lo sucedido en la pista.
Tras la reanudación, la salida de los ciudadrealeños fue fulgurante, con un José Andrés Torres imparable en los 6 metros, autor de 4 goles casi consecutivos, y obligando al técnico local a parar el choque cuando no se habían cumplido ni 5 minutos (14-20, m. 34).
Cualquier intento de reacción de los alicantinos fue en vano, pues la defensa estuvo a un gran nivel y en ataque el Caserío encontró todo tipo de alternativas, manejando muy bien el 'tempo' del choque para terminar imponiéndose por un rotundo 25-33.
Dos puntos que refuerzan la moral y la confianza de un equipo que, en la próxima jornada, recibirá este domingo en el Quijote Arena (12 horas) al UBU San Pablo Burgos, que marcha líder de la categoría.
Un duelo directo entre dos firmes aspirantes al ascenso y que puede resultar crucial en el devenir de la temporada.
FICHA TÉCNICA.
AGUSTINOS ALICANTE.
Lautaro Tomás Mendieta, Pol Varela, Aarón González (2), David Quiles (5), Juan de Dios Linares, Juan Pedro Espinosa (3), Jorge Laredo (3), Hugo Ponce (4), Rubén Sánchez (1), Darío Suárez (1), Santiago Laredo (6), Borja Gabriel Maho, Javier Carrión, Guillermo Soler, José Khalil Tarazi.
CASERÍO CIUDAD REAL. Santi Giovagnola, Pablo Campanario (4), Marcos Fis (8), Jorge Romanillos (2), Francisco Ruiz, Santi Canepa (3), Sergio Casares (2) -siete inicial- Óscar Ruiz, Radojicic (3), Augusto Moreno de la Santa, Daniel Palomeque, Adrián Trancón, Ángel Pérez de Inestrosa (1), Nico Barceló, José Luis Castilla, José Andrés Torres (10).
ÁRBITROS. José Alberto Romero Cruz y Enrique Javier Romero Cruz. Excluyeron dos minutos a Aarón González (2), Suárez, Tarazi; Santi Canepa, Augusto Moreno (2), Palomeque, Radojicic.
PARCIALES. 2-4, 6-6, 10-8, 10-9, 10-13, 12-15 (descanso); 14-20, 16-22, 18-26, 21-28, 23-31 y 25-33 (final).
PARCIALES. Encuentro correspondiente a la novena jornada de la División de Honor Plata dispuatdo en el pabellón del Colegio Agustinos de Alicante.