El artista y profesor salmantino Diego Vallejo Pierna recibirá este viernes el trofeo que le acreditará como ganador de la XXXII edición del Certamen de Artes Plásticas Manuel López Villaseñor, además de su dotación en metálico de 11.000 euros. El también profesor de la Universidad de Salamanca concurrió con la obra titulada Puerta de atrás ventana principal II, que pasará a formar parte de los fondos municipales. Con esta pieza, el Ayuntamiento de Ciudad Real incorpora en su colección un lienzo de un artista que ha llamado la atención en los últimos años en diferentes espacios. A modo de ejemplo, el pasado verano ya consiguió el éxito en la provincia a través de la 84 Exposición de Artes Plásticas de Valdepeñas, donde se alzó con la medalla de oro; además de ganar el certamen de Arte Emergente de Sabadell (Barcelona). Su trayectoria artística arranca en 2008 con su participación en varias muestras de carácter colectivo y a partir de 2011 realiza ya varias exposiciones de carácter individual, que próximamente

Esta semana recibirá el primer premio del XXXII Concurso de Artes Plásticas Manuel López Villaseñor, ¿qué le atrajo de este certamen?

No lo conocía de antemano. Apareció publicitado en una página de certámenes, vi la antigüedad y los fondos que ha creado y pensé que era interesante formar parte de ello.

¿Cómo definiría la obra que le ha valido para alzarse con este galardón?

Puerta de atrás, ventana principal presenta la parte posterior de una casa. Sitúa al espectador dentro de una visión expiatoria. Siendo el encuadre la puerta secundaria, centra la ventana y toma carácter principal al situarnos dentro de la imagen. ¿Quién observa y quién es observado? Tomando la dimensión de casi un retrato del que observa a través de lo que aparentemente cree estar viendo.

¿Qué le llevó a elegirla para enviarla a Ciudad Real?

Pienso que es una buena pieza y podía estar a la altura de la convocatoria. Tengo mucho cariño a este cuadro. Forma parte de una serie, una de cuyas obras fue a parar a la colección del Banco Sabadell.

Usted trabaja tanto la abstracción como la figuración, ¿qué le lleva a decantarse por una u otra cuando se encuentra ante un lienzo en blanco?

El grado de semejanza con el referente, siempre va ajustado con lo que quiero contar y en qué modo. No siempre hay que evidenciarlo todo. Es por eso que la figuración o la abstracción no es decisiva en sí misma. Tiene más importancia la forma en la que se reconstruye la imagen con la pintura.

El pasado verano ya obtuvo la Medalla de Oro de la Exposición de Artes Plásticas de Valdepeñas ¿considera que le ha cogido el truco a la provincia?

Los concursos forman parte de una serie de casualidades. Creo en las buenas casualidades, sobre todo son así cuando se buscan. Como la pintura en sí misma es azarosa, pero hay que buscarla.

El premio en Ciudad Real lleva asociada una exposición en el Museo López Villaseñor, ¿qué le gustaría mostrar aquí?

Tendré que pensar la propuesta. Me interesan los contextos en los que se introduce la mirada como hilo narrativo a la hora de iniciar el trabajo. Utilizo la fotografía para reconstruirla pictóricamente, induciendo de esta forma a la imagen como canal.

Usted es también profesor en la Universidad de Salamanca, ¿cómo influye su perfil docente en su tarea artística?

Me parece que la pedagogía es muy interesante para poder revisar la prácticas artísticas. De esta forma, tratando de hacer comprender, es necesario revisar lo que se da por supuesto, surgiendo nuevos planteamientos que generan poder cuestionarse el arte desde nuevos puntos de vista.