Ciudad Real registró hasta 620 accidentes de tráfico durante el año pasado en los que hubo un elemento en común: la presencia de fauna en la carretera. No hubo que lamentar ninguna víctima mortal entre los conductores implicados, ningún herido grave y sí una docena de heridos leves en un tipo de accidente que deja cinco siniestros a la semana por vías ciudadrealeñas, donde la carretera más comprometida por este tipo de sucesos es la N-430.

La polémica nacional que cruza de oeste a este la provincia y sobre la que Fomento trabaja para mejorar su seguridad vial con un ambicioso, y millonario, plan acumuló en 2023  más de medio centenar de accidentes con animales. Sin embargo, el tramo más peligroso no es precisamente sobre ese que trabaja el Ejecutivo, el que comunica con Extremadura, donde se concentra uno de los mayores tráficos pesados de la provincia y también del país.

La presencia de animales en la calzada provoca más accidentes en el otro extremo de la carretera, en el tramo que conecta Ciudad Real con Albacete: en concreto, desde Alhambra a Ruidera y hasta llegar a Ossa de Montiel. En apenas 30 kilómetros, el año pasado se produjeron una quincena de accidentes en los que se vieron implicados animales. En nueve de ellos, ciervos, en otros cuatro, jabalíes. 

Y es que la estadística que recopila la Dirección General de Tráfico anota también el tipo de animal que estaba presente en la calzada en el momento del accidente. En más de 200 de ellos era un jabalí. Uno de cada tres siniestros. El segundo animal más presente en accidentes de tráfico en la provincia son los perros. Estuvieron en 115 percances, uno más que los que protagonizaron los ciervos, que fueron hasta 114. El cuarto lugar, ya por debajo del centenar de accidentes, fue para el corzo (73), seguido de zorros (40), aves (19), ovinos (11) y felinos, que sumaron una decena. En un accidente de tráfico estuvo implicado un lince ibérico. 

Además de la N-430, las otras vías con más accidentes en las que participaron animales fueron la N-420, de Fuencaliente a Pedro Muñoz, y que sumó más de una treintena de siniestros, sobre todo por ciervos. Después aparece una de titularidad autonómica, la CM-403, entre Torre de Abraham y Ciudad Real capital, aquí, por jabalís. En cuanto a la presencia de perros, la N-430 vuelve a ser la carretera que más accidentes sufre por estos animales, por delante de dos autovías: la A-4, la de Andalucía, con nueve accidentes ocasionados por canes; y la A-43, la que va de Ciudad Real hasta la provincia de Albacete, con siete accidentes con perros implicados.