La desaparición de Juan Miguel Isla, en julio de 2022, y la de Jesús María González en junio de 2019 podrían tener un punto en común. Así lo indica el abogado de la familia de Jesús María González, quien apunta a una persona que estaría vinculada a ambos casos y que podría haber sido la intermediaria en la compraventa que Isla estaba realizando cuando desapareció y la venta que también hizo González cuando desapareció.
Dionisio Pérez Muñoz, el abogado de la familia de Jesús María González, señala que han conocido esta similitud al abrirse el secreto del sumario del caso de González. González, un empresario de 55 años, afincado en Manzanares, desaparició en la localidad en junio de 2019. "Había vendido dos coches" e iba a cobrar en el momento de la desaparición. "A los dos o tres días vino su hermano, que estaba en el extranjero, comprueba que no le contestaba al móvil desde ese día y denuncia la desaparición", ante la Guardia Civil. González tenía previsto un viaje y, en principio, se pensó que era una ausencia voluntaria. La Tribuna ya contó en su dia que el coche de González seguía en la cochera y desde la denuncia por su desaparición no se habían producido movimientos en sus cuentas.
La similitud está en "la forma de la desaparición, hay una persona que participa o que es la última que está entre los dos desaparecidos y porque en los dos casos había un dinero que se les debía entregar en el momento de la desaparición", indicó Pérez Muñoz, quien recuerda que las actuaciones por González han estado "secretas", ya no lo están, y se ha dejado actuar a la Guardia Civil pensando que "seguirían alguna pista que diera resultado positivo de encontrar el cuerpo o al autor de la desaparición". En esas diligencias se indica, explica el abogado, quién fue la última persona que estuvo con González y que se da la coincidencia de que es "la misma persona que ha estado con el segundo desaparecido".
Jesús María González, desparecido en 2019, y Juan Miguel Isla, en 2022, en ManzanaresEn el caso de Juan Miguel Isla desapareció en Manzanares en julio pasado, sin tener hasta la fecha ninguna noticia sobre su paradero. La última vez que se le vio fue en esta localidad, donde llegó desde Alicante para cobrar la venta de unas fincas. Estos días la Guardia Civil está difundiendo las imágenes de su vehículo y ha iniciado un proceso de búsqueda para preguntar entre los vecinos si lo reconocen o conocen algo de su desaparición.
El abogado Pérez Muñoz señala que imagina que se estará investigando esta coincidencia, al haber una persona que vincula ambas desapariciones, así como la similitud que existe entre ambos casos. "No es nada normal ni para la familia ni para la sociedad que dos personas adultas, de entorno a 50 años, desaparezcan sin dejar rastro. Que no aparezcan los delincuentes, deja a la ciudadanía indefensa y a los delincuentes impunes", concluyó el abogado.