El Gobierno de Castilla-La Mancha, en su apuesta por garantizar su apoyo y compromiso con el sector cinegético, recuperó en 2019 los cotos sociales. Se trata de terrenos delimitados, cuya titularidad de los derechos cinegéticos la ostenta la Administración regional y su finalidad es facilitar el ejercicio de la caza a los cazadores. «Es una medida con la que reforzamos el aspecto social de la caza y la hacemos más accesible a todos los sectores de la población, también a quienes menos recursos», afirma a La Tribuna la delegada provincial de la Consejería de Desarrollo Rural en Ciudad Real, Cristina López Zamora, quien recuerda que estos cotos, gestionados por el Gobierno regional, «se cerraron y se intentaron privatizar» en la época de gobierno de María Dolores Cospedal y se recuperaron en 2019 con Emiliano García-Page como presidente autonómico.
La medida supone el cumplimiento del compromiso del propio García-Page de apoyar la caza como un sector endógeno, que dinamiza la economía del medio rural, que ayuda a cuidar y conservar el entorno natural y que fija población en los pueblos. Ubicados en montes públicos, «contribuimos también a una mejora de la biodiversidad con terrenos de altos valores que tenemos, por ejemplo, en la provincia».
Castilla- La Mancha cuenta con nueve cotos sociales, de los que dos están en Ciudad Real: Peñas Negrillas, que cuenta con una superficie de unas 2.500 hectáreas entre los términos de Viso del Marqués y Almuradiel; y el de Riofrío, en Puebla de don Rodrigo y Arroba de los Montes, con 825 hectáreas y que se ha unido este año al listado. Además, puntualiza la delegada provincial, hay tres más localizados en Anchuras, «aunque estos se gestionan desde la provincia de Toledo por su cercanía, por lo que nosotros no los contamos como de la provincia».
La primera montería de esta temporada en los cotos sociales de la provincia será este sábado, 18 de noviembre, en Peñas Negrillas, donde se contará con 55 puestos y donde el año pasado ya se hizo alguna batida. En el monte público de Riofrío se cazará a finales de temporada, también con 55 puestos. Hasta la fecha, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha recibido más de 4.000 solicitudes para cazar en alguno de los cotos sociales, según los datos aportados por el Ejecutivo autonómico. En este sentido, López Zamora señala que de los 55 puestos, «el 40 por ciento se reserva a peticiones de cazadores locales, otro 40 por ciento son para peticiones regionales y un 20 por ciento para los cazadores nacionales».
Con estos datos, la delegada provincial de la Consejería de Desarrollo Rural en Ciudad Real se muestra «satisfecha» por el resultado que está teniendo esta iniciativa y confió en que el próximo año «serán aún mejores» tras la celebración de las monterías. «Estamos muy contentos de recuperar esta figura que era muy demandada, no solo a nivel regional y provincial sino también a nivel local, donde gracias a los cotos sociales se ayuda a impulsar también la actividad cinegética», argumentó, al tiempo que recordó la relevancia del sector cinegético en la región, con más de 14.000 empleos directos, 600 millones de euros de impacto económico, más de seis millones de hectáreas con 5.600 cotos de caza y 115.000 licencias de caza, tras un repunte en los dos últimos años. De hecho, en Ciudad Real, una de las provincias de España con más actividad cinegética, supone un aporte del 1,7 % al Producto Interior Bruto (PIB) provincial.
López Zamora asegura que desde el Gobierno regional «se continuará fomentando la actividad cinegética como coto social», quizás con la ampliación de esa lista que hasta el momento conforman nueve cotos.