Iván Ayala triunfa en el Nacional de Globos Aerostáticos

La Tribuna
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El XXXIX Campeonato de España se ha celebrado en Ciudad Real desde el jueves y ha tenido una magnífica acogida, con actividades como la 'nightglow'

Fotografía de familia de los participantes. - Foto: CD Manchego Aerostación María Luisa Cabañero

El riojano Iván Ayala ha logrado el triunfo en el XXXIX Campeonato de España de Globos Aerostáticos celebrado en Ciudad Real desde el pasado jueves y que esta mañana ha celebrado su última jornada. Han completado el podio el valenciano Blai Carbonell y el catalán Carles Figueras.

La comeptición s eha celebrado en cuatro jornadas matinales de jueves a domingo, pues los vuelos vespertinos del jueves, viernes y sábado tuvieron que ser suspendidos por las inclemencias meteorológicas.

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Los tres mejores de la general.
Los tres mejores de la general. - Foto: CD Manchego Aerostación María Luisa Cabañero
Organizadoras del evento.
Organizadoras del evento. - Foto: CD Manchego Aerostación María Luisa Cabañero
Iván Ayala triunfa en el Nacional de Globos Aerostáticos
Iván Ayala triunfa en el Nacional de Globos Aerostáticos
Iván Ayala triunfa en el Nacional de Globos Aerostáticos
Iván Ayala triunfa en el Nacional de Globos Aerostáticos - Foto: Rueda Villaverde
Iván Ayala triunfa en el Nacional de Globos Aerostáticos
Iván Ayala triunfa en el Nacional de Globos Aerostáticos - Foto: Rueda Villaverde
Iván Ayala triunfa en el Nacional de Globos Aerostáticos
Iván Ayala triunfa en el Nacional de Globos Aerostáticos - Foto: Rueda Villaverde

Este XXXIX Campeonato de España de Globos Aerostáticos ha estado organizado por el CD Manchego de Aerostación María Luisa Cabañero, junto al Ayuntamiento de Ciudad Real. Quince globos han participado en este Nacional, entre ellos el de la anfitriona, María Luisa Cabañero, y han dejado bellas estampas durante estos días en el cielo ciudadrealeño, despertando el interés y curiosidad de pequeños y mayores. Especialmente emocionante fue la 'nightglow', celebrada en la noche del sábado y que tuvo una magnífica acogida de público. Fue un espectáculo de fuego, luz y música, con las llamaradas de los globos siguiendo los compases de la música.