Agentes de la Guardia Civil pertenecientes a los Servicios de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), localizaron hace pocos días un espécimen de pitón real en una calle céntrica de la localidad de Daimiel.
El reptil fue avistado por varios vecinos, quienes alertaron a las autoridades debido a la extrañeza y peligro potencial del hallazgo. La rápida actuación de los agentes concluyó con la captura segura del animal.
La pitón real está incluida en el Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), que regula su comercio para prevenir que los especímenes corran riesgo en su supervivencia.
Aunque no es venenosa y suele tener un carácter tranquilo, esta especie requiere cuidados específicos, incluyendo un ambiente controlado de temperatura y humedad, alimentación adecuada y espacio suficiente.
El hallazgo fue comunicado a la Subdirección General de Biodiversidad Terrestre y Marina del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, para que dispusiera su destino, aunque fue finalmente la delegación provincial de la Consejería de Desarrollo Sostenible quien se hizo cargo del animal.
Tras su evaluación fue entregada a un particular autorizado, con la supervisión de la delegación provincial de la Consejería de Desarrollo Sostenible, garantizando el cumplimiento de las normativas relativas a la protección de especies.
Se recuerda la importancia de no adquirir animales exóticos sin una plena comprensión de sus necesidades y obligaciones legales. La tenencia irresponsable no solo pone en riesgo la vida del animal, sino que también puede derivar en situaciones peligrosas para la comunidad, como el abandono o la fuga, tal como ocurrió en este caso.
El abandono de este tipo de animales no solo representa un acto de maltrato, sino que también puede tener graves consecuencias ambientales y sanitarias, por lo que se está investigando para identificar al autor de este hecho.