Rafael Guerrero, entrenador del Calvo Sotelo, se mostró muy disgustado por la derrota de su equipo en el derbi provincial ante el Villarrubia (4-0). Un resultado que deja a los puertollaneros en la décima plaza con 18 puntos, a 4 de las posiciones de play off, que ahora mismo marca el Socuéllamos, precisamente su rival este domingo en el Cerrú.
"La valoración del partido es negativa. Fuera de casa seguimos haciendo agua y no estamos siendo capaces de competir", resumió el técnico toledano visiblemente abatido tras el partido.
"Creo que este partido y el de Azuqueca han sido los peores de esta temporada. Comenzamos mal y los detalles no logramos que caigan de nuestro lado. Somos un equipo que concede demasiado", admitió Guerrero, que considera que su equipo tiene un problema de ansiedad. "Somos capaces de mucho, pero se nos está complicando y estamos en una dinámica donde todo nos sale cruz. Todo el trabajo depende de un resultado y si no mejoramos esos resultados la realidad es que no vamos a poder competir".
Sobre su posible continuidad en el Calvo Sotelo, prefiere no opinar, aunque afirmó que la junta directiva le ha transmitido su respaldo y que tiene a su disposición jugadores para revertir esta situación. "Hay plantilla para cambiar esta dinámica y tengo fuerza para dar la vuelta a esto. Los jugadores son capaces de revertir esta dinámica".
Además, recordó que la Tercera División "es una categoría muy competida a la que hay que tener mucho respeto. En otros grupos igual hay más diferencias, pero en Castilla-La Mancha cualquiera te puede ganar".
Sobre el estado de Pedro Pata, que se lesionó en el encuentro, afirmó que está pendiente de que se le realicen pruebas.