El Caserío Ciudad Real visita este domingo al Burgos con buena parte de las opciones de ascenso directo en juego. Los dos equipos ya jugaron la fase de ascenso la pasada temporada en el Polideportivo El Plantío y ahora se ven las caras en un duelo en el que los locales tienen menos margen de error.
Roi Sánchez, entrenador del UBU San Pablo, reconocieó que para ellos «es la última oportunidad de engancharse al primer puesto» y, por lo tanto, al ascenso directo. No obstante, recuerda que el primer objetivo que se marcaron al principio del curso fue «jugar la fase de ascenso» y lo tienen «muy cerquita».
«Siempre he dicho que las últimas jornadas iban a marcar el objetivo final. Si somos capaces de ganar el partido del domingo, con todo lo que eso significaría, tendríamos opciones de intentar quedar primeros. Si no lo hacemos, tanto el empate como la derrota nos alejan mucho de esa posibilidad», analiza Sánchez, quien espera tener a todos sus hombres disponibles a excepción de los lesionados Maidana y Lesmes.
Roi Sánchez, entrenador del Caserío - Foto: Luis L. AraicoPara el preparador burgalés, «en casa estamos viviendo una situación un poco extraña. Somos el mejor equipo fuera, pero en casa hemos dejado escapar puntos, que ahora echamos de menos. Tenemos que ser más fiables en casa, donde nos quedan 4 partidos de los 6. El objetivo es mostrar nuestra mejor cara ante nuestra afición, pero esto es deporte y hay cosas que se escapan de la lógica».
Del Caserío, asegura que son líderes «por méritos propios» en Liga. «Han encadenado 14 victorias y un empate. Son números estratosféricos. Ha ido manteniendo el bloque desde su ascenso y tiene muchas virtudes. Es una plantilla larguísima, que además cuenta con Marcos Fis, un jugador que marca diferencias. Es un equipo muy coral, con pocas fisuras y que te obliga a estar atento a muchas cosas».
Por su parte, Santi Urdiales, técnico del Caserío, no oculta que llegan a este partido «en una situación privilegiada. Burgos fue el último conjunto que nos venció y, además, lo hizo bien. Para nosotros, presión cero porque estamos en una situación maravillosa. Tenemos que ir a hacer el mejor partido posible, conseguir que el encuentro esté igualado y que ellos puedan sentir esa presión al final de que se les escapa la opción de lograr el liderato».
El técnico santanderino no cree que haya ánimo de revancha tras lo ocurrido en la primera vuelta, «donde defensivamente no estuvimos bien», y considera que la clave del choque estará en el nivel defensivo que puedan exhibir. «Cuando no hemos controlado el partido desde la defensa nos ha tocado sufrir. Todo pasará por parar la gran cantidad de virtudes que tienen», admite Urdiales, que por otro lado no descarta que otros aspectos como el ataque 7 contra 6 puedan ser determinantes.
Para el encuentro en Burgos, volverán a ser baja el serbio Radojicic, que por motivos burocráticos continúa en su país, y los lesionados Carlos Ocaña y Juan Lumbreras. Este último, además, ha sido padre esta misma semana.
«Tenemos una plantilla profunda, somos líderes y para mí es la mejor de la categoría, aunque las diferencias son mínimas con muchos otros conjuntos. Estamos muy bien físicamente, rápidos, defendiendo bien y marcando goles», añade.
Tras el encuentro ante el Burgos, el Caserío visitará la pista del Eón Alicante, segundo clasificado, el miércoles 16 de abril, pero Urdiales reiteró que solamente están pensando en el choque de este domingo.