Las obras de la pasarela ciclopeatonal entre Ciudad Real y Miguelturra avanzan a buen ritmo, pese a que las lluvias caídas en los últimos dos meses las paralizaron casi por completo. Los trabajos se centran actualmente en la construcción de una rampa de acceso de hormigón armado en la parte de Miguelturra, similar a la finalizada ya en la zona de la capital, a la espera de recibir las cuatro piezas que conforman el tablero y que se están fabricando en unos talleres de Vitoria.

Para soportar el peso de esta plataforma, la adjudicataria de las obras, la UTE conformada por las empresas Seranco y Construcción Repair, está levantando unas torres provisionales, que se desmontarán una vez que se hayan instalados los pilones y los cables de los que colgará la pasarela. Las piezas que forman el tablero irán soldadas y tienen unas dimensiones aproximadas de seis metros de ancho y 40 de largo, y cada una de ellas pesa 45 toneladas, «relativamente poco para lo grandes que son», apunta a La Tribuna la jefa de obra, Ana Barenca, que confía en que el montaje finalice a lo largo del próximo mes de mayo.

Además, los operarios están terminando de hormigonar las pilas de apoyo de la pasarela principal, así como las últimas cimentaciones. Uno de los carriles de la autovía está cortado al tráfico para poder llevar a cabo todos estos trabajos. Tras el montaje del tablero, vendrá la instalación de los pilones, los cables y las barandillas y los ensayos para comprobar que todo ha quedado en perfectas condiciones de uso. Si todo marcha según lo previsto, las obras estarán listas para finales de agosto o principios de septiembre, «antes de que acabe el verano».

Estado en el que se encuentran las obras de la pasarela ciclopeatonal entre Ciudad Real y Miguelturra - Foto: Tomás Fernández de Moya

Esta obra, adjudicada por 6,48 millones de euros, con cargo a los fondos europeos Next Generation, supondrá la construcción de una estructura colgante de 153 metros de longitud sobre la A-43, a la que se accederá por unas rampas laterales. Tendrá iluminación y será accesible en todo su recorrido.

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La pasarela saldrá justo al inicio de la glorieta de la A-43 en dirección Ciudad Real, con una rampa inferior al 6%, para cumplir el código de accesibilidad, en curva, hasta alcanzar una altura de cinco metros sobre la autovía. En la otra zona, en Ciudad Real, se seguirá la curva hacia la carretera principal, con una rampa también con un porcentaje inferior al 6%.