Uno de los puentes de acceso a Fuencaliente de la N-420, conocido como el de la hiedra, se cerró ayer al tráfico después de que los vecinos alertaran al Ayuntamiento sobre el mal estado del mismo y éste a su vez informase a Fomento. De esta forma, quienes quieran entrar en la localidad desde la N-420 lo tendrán que hacer desde el único acceso abierto de momento, el más cercano si se viene desde Andalucía y situado a un kilómetro del que se cerró ayer. Esta decisión, como comentaron varios vecinos a La Tribuna, se adoptó después de dos días de concentraciones y reuniones con el alcalde de Fuencaliente, Valentín Muñoz, en los que le trasladaron su «miedo» por la mala situación en la que se encontraba este puente, ya que con las lluvias se han caído numerosos cascotes y se han producido desprendimientos de tierra.
Con el de ayer ya son cuatro los puentes afectados. Un tramo de la N-420, a la altura de Fuencaliente, en el kilómetro 93, permanece cortado desde la madrugada del domingo al lunes después de que uno de los que atraviesan el Yeguas se desplomara por la crecida del río y provocara la muerte de dos personas, un camionero de Malagón de 82 años y un joven de Villanueva de Córdoba de 23. Ya a principios de marzo, concretamente el día 7, otros dos puentes situados a escasos metros de donde ocurrió el accidente se hundieron, por lo que la carretera nacional estuvo cerrada al tráfico hasta el 22 de marzo cuando se abrió un desvío provisional por la antigua carretera.
Ante esta situación, las asociaciones y peñas de Fuencaliente han trasladado su inquietud al Ayuntamiento y exigido a Fomento una solución urgente para la N-420. Precisamente ayer, medio centenar de personas se concentraron por la mañana frente a la Casa Consistorial tras enterarse de que el médico de cabecera no había podido llegar al municipio por el mal estado del camino vecinal que ahora une la localidad con la provincia de Córdoba.
El puente de acceso a Fuencaliente viniendo de Puertollano ha sido cortado por el mal estado - Foto: Helga García Al mismo tiempo, los vecinos de Fuencaliente volvieron a mostrar así su indignación por este accidente que «se podía haber evitado», porque como comentó Prado García, concejala del PSOE en el municipio, ya habían advertido en varias ocasiones de su mal estado. «Intentamos que hechos como los de la madrugada del domingo no se vuelvan a repetir, porque se sabía que ese puente se iba a caer y que no lo habían arreglado bien», dijo.
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