Bajo los compases de jazz en directo y el tenue azul de los focos, la llamativa imagen de un colorido Don Quijote dio la bienvenida esta tarde a los asistentes a la presentación en Madrid de 'Sabor Quijote', el proyecto de promoción de la provincia de Ciudad Real. La Casa de Lector, ubicada en el complejo cultural de Matadero, acogió este acto con el que la Diputación llevó a la capital de España la riqueza natural, cultural, gastronómica y patrimonial de la provincia con el personaje universal de Cervantes como gran embajador. Un evento, enfocado en esta ocasión en la Cultura, que sirvió para celebrar el 40 aniversario de la Biblioteca de Autores Manchegos (BAM).
"Estamos hablando de una de las editoriales más importantes de España y también un ejemplo del trabajo que debe hacer una Diputación para apoyar, potenciar y revitalizar la Cultura de una provincia", remarcó el presidente de la Diputación de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde, al hablar de la BAM, un proyecto que reúne "el talento" de los creadores de Ciudad Real. "Tenemos un propósito, que una provincia con tantas cosas que ver y que disfrutar sea conocida. Y a este empeño dedicamos nuestros esfuerzos", enfatizó el presidente que se mostró "orgulloso y contento" por poder presentar 'Sabor Quijote' en Madrid.
Un rincón madrileño rendido al ‘Sabor Quijote’ - Foto: Juan LazaroEn la misma línea, la vicepresidenta de la Diputación, María Jesús Pelayo, hizo hincapié en la necesidad de situar Ciudad Real como "destino turístico de excelencia", un objetivo para el que se creó este 'Sabor Quijote' que vivió en Madrid su última edición del año. Además, aprovechó para anunciar dos nuevos proyectos relacionados con la Biblioteca de Autores Manchegos que se pondrán en marcha en breve: la digitalización del fondo bibliográfico; y una nueva línea de publicación centrada en los jóvenes autores en colaboración con la Universidad de Castilla-La Mancha.
En el acto también se celebró una amena charla en la que participaron el poeta Pedro Antonio González, el historiador Francisco Alía y el ilustrador Roselino López. González, que participó en la 'Antología Ciudad Real: Poesía Última', el primer libro publicado por la BAM en 1984, recordó que su entrada a la literatura se produjo gracias a esta iniciativa de la Diputación que nació en una época en la que "casi había que ir pidiendo de puerta en puerta para que te editasen un libro". "Y ahora la BAM es la casa de todos", subrayó. "Pocos proyectos culturales se han mantenido tantos años en la provincia", apuntó Alía, que se convirtió en su momento en el autor más vendido de la BAM con 'La Guerra Civil en retaguardia. Ciudad Real (1936-1939)', un libro que trataba "un tema desconocido no solo en la provincia, sino también a nivel nacional". Para López, que ilustró el libro 'Dragón, el tragón, y otros poemas', de José Aureliano de la Guía, "no hay nada parecido a la Biblioteca de Autores Manchegos en toda España, ni por nivel ni por duración".
Un rincón madrileño rendido al ‘Sabor Quijote’ - Foto: Juan LazaroY aunque este 'Sabor Quijote', el último del año, estuvo centrado en la Cultura, no faltaron los productos de la gastronomía de Ciudad Real con los que se cerró el acto que, por un ratito, convirtió Madrid en pedacito de Ciudad Real.