La cobertura en atención primaria llegará al 80% en verano

A. Criado-LT
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Sanidad explica que todas las camas de los hospitales de la región «están disponibles» en los meses estivales, en los que «se adecua la actividad asistencial a la programada»

Un paciente es explorado durante una consulta médica. - Foto: Rueda Villaverde

La asistencia sanitaria está garantizada en todos los centros de salud y puntos de atención continuada de Castilla-La Mancha durante este verano. Así lo aseguran a este diario fuentes de la Consejería de Sanidad, tras la presentación de un plan especial de sustituciones de personal sanitario para la época estival por parte del Sescam, que garantiza una tasa de cobertura del 80% en atención primaria, un porcentaje similar al registrado el pasado año.

Una garantía que se extiende a la red de hospitales de la región, pese a la crisis de profesionales sanitarios por la que atraviesa el país, acrecentada este año por el retraso en la incorporación de los nuevos MIR. Según apuntan las mismas fuentes, en los centros hospitalarios de Castilla-La Mancha «no se produce un cierre de camas» durante el periodo estival, «están todas disponibles», y lo que se hace es «adecuar la actividad asistencial a la actividad programada», que decrece por las vacaciones del personal.

En este sentido, hace unos días, el director general de Recursos Humanos y Transformación del Sescam, Íñigo Cortázar, insistió en que el plan de verano para el sistema sanitario público regional es el mismo que permanece vigente durante todo el año, como se viene haciendo en los últimos nueve años, con el objetivo claro de «garantizar una asistencia sanitaria de calidad, con las adecuadas condiciones laborales y sustituciones en todos los ámbitos».

No opinan lo mismo en Satse, que este miércoles informó de que los hospitales castellano-manchegos contarán con 192 camas menos en funcionamiento por el cierre previsto por Sanidad aprovechando el perido estival, 72 en los centros ciudadrealeños. El sindicato de enfermería explica que el cierre «programado y progresivo de camas disponibles» para el conjunto es la población es una práctica habitual de todas las administraciones sanitarias en los meses de verano, al igual que la suspensión de cientos de consultas externas, pruebas diagnósticas e intervenciones quirúrgicas en todos los hospitales y otros centros sanitarios públicos.