La Junta de Gobierno local del Ayuntamiento de Ciudad Real tiene previsto aprobar este lunes el proyecto de reforma de la Casa de Cultura, en los jardines del Prado, e iniciar el proceso de contratación de esta obra, que busca recuperar un espacio cerrado desde el año 2011. Será un proyecto con una inversión de 2,1 millones, con 18 meses de ejecución y con el objetivo de destinarlo a uso educativo, con espacio para exposiciones, y varias salas en las que se puedan desarrollar talleres. Se trata de una aprobación que implica que este año, en unos meses, se adjudique la obra, por una parte, y, por lo tanto, que en 2025 se pueda reabrir este inmueble. 

"Es uno de los días más esperados por la ciudadanía y por el equipo de Gobierno", ha dicho la concejala de Urbanismo, Raquel Torralbo, quien acompañada por la alcaldesa, Eva María Masías, han presentado esta reforma. El motivo de hacerlo este viernes, a solo tres días de que ya no pueda haber presentaciones de proyectos por la convocatoria de elecciones, es porque no ha sido hasta esta semana en que la Junta de Comunidades ha dado el visto bueno a la reforma, aunque el proyecto "lleva redactado por los servicios técnicos municipales varios meses". La obra implicará actuar sobre 1.500 metros cuadrados, 500 metros cuadrados tiene cada planta.

La intención del proyecto es trabajar en el edificio bajo tres premisas. En primer lugar, se buscará recuperar el proyecto de Miguel Fisac, quien ideó realizar en los jardines del Prado de Ciudad Real un espacio de encuentro cultural de la ciudad. Se trata de una labor encargada al arqueólogo Miguel Ángel Hervás, quien "ha hecho una evaluación arqueológica del edificio" para resaltar aquellos aspectos claves de Fisac. Además, el proyecto trabajará en "subsanar las patologías" que presenta y que ha provocado que haya humedades, por ejemplo, y que se han ampliado "por falta de uso y antigüedad". Por último, se trabajará en ese sentido del uso educativo. 

Estado actual de la Casa de Cultura. - Foto: Rueda Villaverde

De este modo, se eliminará la rampa de entrada y el mallado en la fachada, se dejará diáfana la antigua hemeroteca de la biblioteca el edificio, creando el salón de actos que imaginó Fisac y se creará una sala de exposiciones temporales y en la primera planta se ha diseñado un espacio diáfano, con compartimentos para crear una sala amplia o tres en función de las necesidades. Mientras el sótano se dejará para el archivo. Además, se mantendrá la escalera de caracol, tan característica de Fisac en este periodo. También se buscará dar un nuevo uso a los patios interiores, creando zonas de sombra, para que "sean visitables". 

A estos aspectos se suma la modernización del edificio con una mejora de la envolvente térmica, aerotermia, el cambio de tuberías y baños adaptados para ostomizados, mejora de la carpintería metálica con cristales que tengan filtro solar o la dotación de salidas de emergencia, acceso para personas con discapacidad. "Vamos a dejar un edificio adaptado a la normativa actual y recuperando los valores de Fisac", ha dicho Torralbo, quien agradeció el apoyo del equipo de Gobierno a este proyecto, el último, recordó, que presentará en el Ayuntamiento como edil de urbanismo.

Por su parte, Masías ha señalado que esta obra se encuadra en una serie de proyectos de recuperación del patrimonio como la plaza de toros, el centro social de Pío XII o la compra de las Terreras. "Estamos rehabilitando espacios y cambiando la fisonomía de la ciudad", ha afirmado, gracias a "una ambición, que llevaba dormida muchos años". En este sentido, ha apuntado que se ha pasado de una ciudad que ha demolido parte de su patrimonio, a otra en la que se "ha recuperado, con un exquisito cuidado y mimo para recuperar su estado original".

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