La selección española masculina de baloncesto exhibió carácter y raza para imponerse a Grecia por 84-77 en su segundo partido en la fase de grupos del torneo de los Juegos Olímpicos de París, en un encuentro en el que mandaron durante tres cuartos después de un gran segundo periodo, y donde volvió a destacar Santi Aldama con 19 puntos.
El combinado español sumó una necesaria victoria para seguir con vida en el torneo después de la derrota en el debut ante Australia por 92-80, que obligó a los vigentes campeones de Europa a dar su mejor versión para ganar a los griegos, liderados por su gran estrella Giannis Antetokoumpo, que firmó una gran actuación con 27 puntos y 11 rebotes.
El partido arrancó con un dominio del equipo heleno, liderado por Antetokoumpo, autor de 9 puntos, y que hizo mucho daño a los de Scariolo en la zona. Por el lado español, apareció Santi Aldama, el mejor con 27 puntos en el debut, y que arrancó el encuentro muy enchufado con 8 puntos de salida. Sin embargo, los griegos mandaban en el electrónico 12-20 a falta de tres minutos para finalizar el primer cuarto.
La salida desde el banquillo de Sergio Llull permitió a los españoles recortar la distancia hasta un punto tras los primeros 10 minutos. El balear anotó ocho puntos consecutivos con un triplazo espectacular desde más de ocho metros y con Antetokoumpo encima.
La inspiración del balear siguió tras el primer cuarto, con otro triple que ponía a España por delante en el marcador por primera vez en el choque, y que completaba un parcial de 12-2 que rompió Toliopoulos con un triple. En ese momento, Scariolo dio entrada a Jaime Pradilla, el único jugador que no jugó ante Australia, y que debutaba en unos Juegos. Con el aragonés en pista, el parcial para los españoles fue de 25-10, con 7 puntos y varias buenas defensas sobre Antetokoumpo.
La mejora defensiva se vio además recompensada en ataque con hasta 11 triples en la primera mitad, con la inspiración de Álex Abrines con dos aciertos como más destacado, pero también anotaron de tres Lorenzo Brown y Darío Brizuela, llevando la distancia hasta los 14 puntos con los que se llegó al descanso, después de un enorme segundo cuarto de España, tanto en defensa como en ataque.
Tras el descanso, como era previsible, los helenos aumentaron su intensidad defensiva y se agarraron a su gran estrella para recortar la distancia en el marcador. Por parte española, las pérdidas y las precipitaciones aparecieron en los de Scariolo, que fueron perdiendo su ventaja en el electrónico.
Seis puntos de Giannis Antetokoumpo, y los triples de Walkup y Papanikolaou acercaron a menos de diez a los griegos, pero la irrupción anotadora de Santi Aldama volvió a situarla por encima de la decena. El canario vivió un duelo personal contra Antetokoumpo, en el que se erigió el líder de la selección española y demostró el carácter que atesora, además de su enorme talento.
Pero los griegos siguieron apretando y lograron un parcial final de 0-7 antes de cerrar el tercer cuarto, que les puso a solo seis puntos tras un triple final de Vassilis Toliopoulos. La brecha se acortó aún más en la salida del último cuarto con un 2+1 de Antetokoumpo y otra canasta de la estrella de los Milwaukee Bucks.
Ahí surgió la figura del capitán Rudy Fernández con dos triplazo que rompió ese 0-12 de parcial, pero recibió la respuesta de Toliopoulos, con otros dos aciertos que volvieron a ponerles a solo uno. El partido llegó a los últimos cinco minutos con el marcador de 71-69 para España, pero Antetokoumpo volvió a dejar una exhibición de poderío con un mate que puso el empate a falta de cuatro minutos (71-71).
Ocho puntos consecutivos de los de Scariolo, con dos grandes canastas de Aldama, dos tiros libres de Lorenzo Brown y una penetración de Sergio Llull, estiró la renta hasta los ocho puntos, obligando a Spanoulis, el técnico griego, a detener el encuentro. Sin embargo, los helenos no se rindieron, y un triple de Papanikolaou les volvió a meter en el duelo a falta de un minuto para la conclusión.
Las pérdidas de España y los errores en el lanzamiento de Willy Hernangómez le dieron más suspense al final, al que se llegó con 80-77 y posesión para Grecia. Antetokoumpo dispuso de un triple para colocar el empate, pero el balón no entró y el rebote lo cogió Willy Hernangómez, que anotó dos puntos que sentenciaron el triunfo desde el tiro libre. Alberto Díaz puso la rúbrica con una gran canasta sobre la bocina, que le dio al conjunto español una renta final de siete puntos, clave para la clasificación final.