Ciudad Real pierde 200 guardias civiles y policías en 8 años

Pilar Muñoz
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La provincia ha perdido el 10% de los agentes de la Benemérita y de la Policía Nacional en sus plantillas entre 2011 y este ejercicio

Ciudad Real pierde 200 guardias civiles y policías en 8 años - Foto: Rueda Villaverde

Austeridad y seguridad no casan. La crisis económica ha abierto una brecha en las plantillas de la Guardia Civil y de la Policía Nacional que se antoja harto difícil de cerrar, aunque se haya convocado hace unos meses el mayor concurso de los últimos años para provisión de plazas en estas Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. «Venimos de un largo periodo, más de una década, con vacantes mínimas y ni en un año ni en dos se va a poder recuperar la falta de efectivos. Tienen que pasar varios años para que la plantilla de la Guardia Civil tenga el personal óptimo para el desempeño de su misión», remarcan desde la Asociación Unificada de Guardias  Civiles.

De diciembre de 2011 a julio de 2018 se han perdido en la provincia de Ciudad Real cerca de un 10 por ciento de efectivos de la Benemérita y de la Policía Nacional, aseguran a La Tribuna fuentes del Ministerio del Interior tras indicar que se ha pasado de 1.667 efectivos de Guardia Civil y Policía Nacional a 1.504. «Se ha perdido un 9,8 por ciento de agentes entre diciembre de 2011 y julio de 2018 porque no ha habido convocatorias de plazas» y si las ha habido han sido claramente insuficientes, apostillan.

Este año el Gobierno ha aprobado una oferta de empleo público importante para la Guardia Civil y la Policía Nacional, destacan desde Interior tras subrayar que es la convocatoria más amplia desde hace más de veinte años y reiterar que «durante la última década se han perdido bastantes efectivos».

un binomio imposible. «Seguridad y austeridad son dos conceptos que están reñidos, no son compatibles», recalca en declaraciones a este diario el portavoz del SUP (Sindicato Unificado de Policía), Ramón Cossío, quien añade que «es difícil mantener las cotas de seguridad, los índices que año tras año se arrojan y que son la envidia no sólo de los países del entorno, sino también de una gran parte del mundo, con plantillas deficitarias». Unas cotas de seguridad muy elevadas, pese a tener 10.000 policías menos que hace siete u ocho años en todo el territorio nacional. «Se jubilaban muchos policías y sólo entraban por oposición 200 o 300».

De ahí que no sea extraño que en muchas ciudades sólo haya un coche o dos para patrullar. La falta de personal hace que se resientan el ámbito de la investigación y otros órdenes policiales, incluidas cuestiones tan importantes como la lucha contra la violencia de género, ya que a partir del mediodía o durante el fin de semana no hay en las unidades de familia personal con todos los conocimientos en esta materia por la libranza de la gente.

Castilla-La Mancha, en general, y Ciudad Real en particular «no son una excepción», no escapan a esta realidad. Según los datos que maneja el portavoz nacional del SUP, en 2011 había en la provincia de Ciudad Real 464 policías nacionales y a partir este año empezó la plantilla empezó a menguar. Hace un año la integraban 380 policías, una cifra que sigue a la baja.

La falta de efectivos es más acusada en la Policía Nacional. Según datos del Gobierno, en 2011 había 478 policías nacionales en la provincia y en marzo del año pasado eran 377, es decir un 21,12 por ciento menos. Este porcentaje se eleva al 25 por ciento si se compara estos  efectivos con los 504 de la plantilla tipo. Unos datos que revelan que una cosa es el papel y otra la calle, ya que en realidad sólo había 376 y un agente más de segunda actividad con destino.  La carencia de efectivos se nota especialmente en comisarías locales de Alcázar, Valdepeñas y Puertollano.

Más territorio. La Guardia Civil está en mejor situación desde el punto de vista numérico que la Policía Nacional, si bien es cierto que radio de acción es mucho mayor y tiene a su cargo la protección del medio rural, que es muy extenso y  con largas distancias.

Entre diciembre de 2011 y hasta este año la Guardia Civil ha perdido un 8,65 por ciento de efectivos, al pasar de 1.203 a 1.099, según ha podido saber este diario.

Salvo un ligero repunte entre 2015 y 2016, de ocho agentes, todos los ejercicios desde 2011 la provincia ha ido perdiendo efectivos de la Benemérita. El año en que más se redujo el número de agentes fue 2014 cuando se perdieron 34 respecto a la anualidad anterior, según los datos del Gobierno de España en respuesta a una pregunta en el Congreso formulada en su día por los parlamentarios socialistas Isabel Rodríguez y José María Barreda.

Desde la AUGC apuntan que a  la falta del personal se suma los derechos  laborales reconocidos a los agentes relativos a permisos por festivos trabajados, asuntos propios y periodos fijos de vacaciones lo que se traduce en menos efectivos disponibles para los servicios.