El Museo del Ejército de Toledo, ubicado en el edificio del Alcázar, en pleno Casco histórico de la ciudad, ha abierto sus puertas a cuatro siglos de historia de Cuba y Filipinas españolas, en una nueva exposición temporal, que ofrece una visión del Ejército español en los últimos años del siglo XIX.
Con entrada gratuita, y bajo el nombre de '1898 - El final de cuatro siglos de Cuba y Filipinas españolas', los visitantes podrán disfrutar de «más de 150 piezas» durante su recorrido por las diferentes salas que componen la exposición.
El Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra (JEME), el general Amador Enseñat y Berea, acompañado por el director del Instituto de Historia y Cultura Militar, y el director del Museo del Ejército, fueron los encargados de inaugurar esta exposición que durará hasta el mes de mayo, dando lugar así, al 125 aniversario del controvertido año 1898, lo que «supone una excelente oportunidad para el estudio y la reflexión».
Más de 400 años de legado del Ejército español - Foto: Yolanda LanchaUna de las joyas del recorrido histórico es el boceto del grupo escultórico 'No importa', conservado en el Museo. La frase es tan antigua como la Infantería española y se aplica cuando hay que cumplir una misión, aunque cueste la vida en ello. «El propio autor realizó una reproducción de la obra en yeso, y después nosotros lo pasamos a bronce, que es lo que tenemos aquí. El monumento es lo que articula toda la exposición. Es un monumento que está dedicado a los caídos en Ultramar. El título 'No importa', hace referencia a las reales Ordenanzas de la Armada. Tenían una misión, y tenían que darlo todo por la patria, aunque sea la vida. Entonces, los sufrimientos, penurias, poder caer herido, dar la vida… no importa, lo importante es cumplir con el deber», señalaba el comisario de la exposición, Guillermo Calleja.
El oscuro rincón del olvido. La exposición se propone, ante todo, rescatar del oscuro rincón del olvido los sacrificios y las penurias vividos por los soldados españoles a lo largo de la guerra. La muestra se erige como un tributo a estos protagonistas.