Con el centro de la ciudad levantado en obras, la recaudación de la zona azul se resintió durante el año pasado, cuando registró un nuevo descenso, si bien su impacto fue reducido a pesar del importante número de plazas que se han perdido, 78. En concreto, el llamado estacionamiento regulado, la ORA, supuso unos ingresos totales de 1.202.083 euros en 2024 para las dos empresas adjudicatarias, Dornier y Eysa, lo que supone apenas 6.800 euros menos en relación con el año anterior.
La diferencia, no obstante, es más significativa en relación con el ejercicio 2022, cuando se recaudaron 1.243.375 euros. Es decir, ha caído en 41.200 euros en dos años, si bien en ese ejercicio no se había iniciado la peatonalización.
El nuevo 'golpe' a la recaudación llega en un momento de cambios. Las obras han 'borrado del mapa' 78 plazas de zona azul y, de ahí que las empresas adjudicatarias hayan planteado distintas medidas para compensar esas pérdidas, si bien el Ayuntamiento reitera que aún no se han concretado y que se darán a conocer una vez que finalicen las obras de peatonalización. Además está pendiente la actualización de las tarifas de 2025.
La recaudación de la zona azul cae por la peatonalización - Foto: Rueda VillaverdeSerá entonces cuando se dé a conocer una auténtica cascada de decisiones en relación a la movilidad. Serán, de hecho, las más importantes de las adoptadas en esta materia en los últimos años. Y es que, estas decisiones están vinculadas a la futura Zona de Bajas Emisiones, de la que aún se desconoce su funcionamiento, aunque ya se sabe que se limitarán precisamente a todas las calles peatonales de la ciudad. También en ese momento se darán a conocer los disuasorios que se pondrán en marcha en la ciudad, como es el caso del parking del teatro-auditorio.
En relación con la zona azul, los datos a los que ha tenido acceso este diario reflejan que la estancia media superó en 2024 los 60 minutos en el área que gestiona la empresa Dornier, la más céntrica, mientras que cayó por debajo de los 40 minutos en la zona que gestiona la empresa Eysa, la que se amplió en 2013.
En cuanto a las multas, dejaron algo menos de 20.000 euros en ingresos en Dornier, la cifra más baja desde al menos 2017, ya que desde esa fecha no había bajado de esa cantidad. Las anulaciones aportaron algo menos de 10.000 euros.
Por lo que respecta a la empresa Eysa, la cuantía en multas se situó en torno a los 12.000 euros, con una tendencia ligeramente alcista, mientras que las anulaciones fueron poco a poco a la baja, en torno a los 4.000 euros.
El uso de la zona azul se ha modernizado en los últimos años con la puesta en marcha de aplicaciones para móviles, si bien los parquímetros siguen obteniendo la mayor recaudación; más de 100.000 euros en los meses de marzo, junio y diciembre. Por su parte, el pago mediante las app deja en torno a 40.000 euros en los meses de más demanda.
La zona azul cuenta en la actualidad con un millar de plazas en la capital, a las que se suman las 819 que había de residentes, pintadas de naranja, y las 3.557 en zona no regulada, pintadas de blanco. «Tomando como referencia un índice de rotación de seis vehículos al día, la capacidad de la zona azul sería de 7.128 vehículos al día», detalla el Consistorio.