El Caserío está a cinco partidos de devolver el balonmano de Ciudad Real a la Liga Asobal. Una recta final de competición donde depende de sí mismo, aunque el calendario es realmente exigente, por lo que la prudencia es máxima en la escuadra manchega, que ha encadenado nueve victorias y una vuelta completa sin perder.  

Dado que el cuadro ciudadrealeño adelantó su partido de la jornada 26, que resolvió con victoria frente al Lanzarote, tiene un encuentro más jugado que Alicante y Burgos, sus dos únicos rivales ya en esa lucha por el liderato, plaza que otorga el ascenso directo a la Liga Asobal. 

Por otro lado, matemáticamente el Caserío ya se aseguró jugar la fase de ascenso, que disputan del segundo al quinto en formato de 'final four', con el premio del ascenso para el campeón, mientras que el subcampeón jugará una promoción ante el antepenúltimo de la Liga Asobal.

En esta parte final de la liga regular de Plata, el equipo que entrena Santi Urdiales deberá visitar las pistas del Burgos y Eón Alicante en las dos próximas jornadas, por lo que todo está por decidir.

Con un encuentro más disputado, el Caserío aventaja en 3 puntos al Eón Alicante y en 6 al Burgos. Este domingo, a las 12 horas, los amarillos vuelven al polideportivo ElPlantío de Burgos, donde ya disputaron la pasada campaña la fase de ascenso, perdiendo en semifinales por la mínima ante el Villa de Aranda del manzanareño Javi Márquez. En la primera vuelta los cidianos ganaron por 25-27, en lo que ha sido la última derrota en Liga del Caserío, que ha completado una vuelta entera sin perder.

Ya el miércoles 16 de abril los manchegos visitarán la pista del Eón Alicante, que en la primera vuelta sucumbió en el Puerta de Santa María por 34-31, otro dato importante, pues el 'gol average' puede terminar siendo crucial.

Tras estas dos salidas, el Caserío recibirá el último fin de semana de abril al Ibiza, que ahora mismo está luchando por la permanencia y que en las dos temporadas que llevan los ciudadrealeños en Plata han ganado en Ciudad Real. 

La última salida de la liga regular será a la pista del Triana Sevilla, un recién ascendido que está yendo de menos a más y que ya se ha aupado a la novena plaza, mientras que el Caserío concluirá la Liga en casa frente al Sinfín Santander, recién descendido de Liga Asobal y que ahora mismo cierra esa zona de la fase de ascenso.

Cinco partidos durísimos, por lo tanto, para el equipo de Santi Urdiales, que apela más que nunca al partido a partido.

SUS RIVALES. El Burgos, por su parte, tras recibir al Caserío, debe jugar aún en casa ante Agustinos, Cisne Pontevedra y Eón Alicante, y tiene que visitar al filial del Barça yLanzarote.

Por su parte, el Eón Alicante debe jugar en casa ante Antequera, Caserío y el derbi local con Agustinos y se desplazará a las canchas del Atlético Novás, Barça Atlètic y Burgos.

Por lo tanto, todo por decidir en esa zona alta hasta mediados de mayo en una recta final de competición que se presenta de auténtico infarto.