El Alarcos repite como local, aunque esta vez en el pabellón Puerta de Santa María, donde este domingo (12 horas) recibirá al Limobel Pozuelo en un derbi provincial con muchos alicientes correspondiente a la quinta jornada en el Grupo E de Primera Nacional. El equipo ciudadrealeño quiere hacerse fuerte en casa y, tras su contundente triunfo como local frente al Elche, desea sumar dos nuevos puntos frente a un Limobel Pozuelo que, tras ganar los dos primeros partidos de Liga, perdió después los otros dos ante Elda y Levante.
Un punto separa a ambas escuadras, por lo que se espera un derbi muy igualado y donde los detalles pueden decidir. En pretemporada, los pozueleños se llevaron la victoria tanto en la Copa Diputación como en el Trofeo Junta.
Andre Semedo, una de las incorporaciones del Alarcos, admite que "un derbi siempre es especial. Conocemos bien a nuestro rival y estamos convencidos de que tenemos equipo para ganar", afirma el portugués.
El primera línea luso asegura que el equipo ha entrenado con mucha intensidad esta semana y que son plenamente conscientes de la importancia que tienen estos partidos como locales. Por ello, señaló que "estamos muy motivados".
Con el paso de las semanas cree que el equipo "está evolucionando" y en lo personal asegura sentirse muy a gusto y con ganas de aportar al equipo para estar arriba.
Sobre las claves del partido, se centró en la defensa, convencido de que si están bien atrás lograrán los puntos.
Por su parte, el Limobel Pozuelo ya vela armas para el choque de este domingo. El técnico de los pozueleños, Jesús Herrero, fue uno de los fundadores del Alarcos, y además de directivo, fue también jugador y entrenador en una etapa que acabó de forma convulsa. Como ya sucedió la pasada campaña, ahora vuelve a verse las caras con su anterior club y son bastantes los jugadores e integrantes del cuerpo técnico que han defendido ambas camisetas.
Los pozueleños llegan a este derbi con 4 puntos, conseguidos en las dos primeras jornadas frente a Torrevieja y UCAM Murcia, un nivel que ahora esperan retomar.
Óscar Caballo, primera línea del Balonmano Pozuelo, no oculta que disputar un derbi "es muy bonito. Se nota en el vestuario", admite. El jugador ciudadrealeño asegura que su equipo llega muy bien a este encuentro, "entrenando con mucha intensidad", y espera que "demos el do de pecho. Llevamos dos partidos que no hemos sido nosotros. No hemos mostrado nuestras señas de identidad y hay que recuperar el nivel". Sobre el Alarcos, indicó que es un conjunto "muy competitivo, que no te regala nada. Tiene jugadores como Óscar Pinilla, que dirige muy bien en el centro, o Jota Serrano en defensa y en el dos para dos, que son muy buenos".
Sobre el cambio al Grupo E esta campaña , afirma que el Grupo F, de donde proceden, puede tener "más nivel, pero en Primera Nacional hay mucha calidad, con rivales complicados y hay que competir muy bien".