La Fundación Benéfica Legado Bustillo y la cooperativa Santa Catalina unen sus fuerzas. Ambas instituciones acaban de firmar un convenio de colaboración destinado a la formación de agricultores y ganaderos en sus respectivas áreas de trabajo. La iniciativa parte del recién creado Centro de Estudios Agropecuarios y Medioambientales 'Cibeles', dentro del Plan Estratégico Horizonte-2032, que ha puesto marcha la fundación. La presidenta del patronato, Luisa Márquez, y el presidente de la cooperativa, Pedro José Martín-Zarco, han escenificado el acuerdo ante los medios de comunicación.
Aunque todavía no se ha especificado el contenido concreto de las acciones formativas a desarrollar, Luisa Márquez ha enfatizado la necesidad de formar al amplio sector agropecuario que opera en La Solana. Y desde el Legado Bustillo entienden que no lo pueden hacer solos. "No podemos abordar un proyecto de esta magnitud sin el apoyo de la principal institución agroalimentaria de nuestra localidad, como es la cooperativa Santa Catalina", ha señalado. Insiste en que se trata de acercar el mundo académico a las prácticas agrícolas sobre el terreno, transfiriendo innovaciones y servicios directamente a los agricultores.
El acuerdo contempla mejorar la capacidad competitiva de las explotaciones y la estabilidad del empleo a través de la formación, ha estacado. Esa será la herramienta principal que le dé sentido. Se pretende dignificar la formación agropecuaria y conectar con el tejido social. "El cambio climático, la despoblación y el relevo generacional son factores determinantes en la forma de vida que hemos conocido hasta ahora, de modo que se hacen precisas alianzas de esta naturaleza", añadió la presidenta de la fundación, que tildó de 'imprescindible' este compromiso de colaboración, a fin de abordar los desafíos que ya están aquí. Amén de profesionales, esta formación también afectará a los tutores y mentores de los propios estudiantes.
Pasaporte hacia el futuro
En este sentido, también ha puesto el acento en la necesidad de fomentar la sostenibilidad medioambiental, junto a la económica social. "Es una realidad que en La Solana vivimos de la tierra, y si el campo dejara de ser sostenible perderíamos nuestro modo de vida". "Debemos prepararnos para no perder las riendas de nuestro destino y de nuestro futuro". También apela al 'ADN solanero': "Somos gente sencilla, viva, con coraje, que tenemos que moldear el futuro para adelantarnos a él". "Siempre hemos dicho que la formación es el pasaporte hacia el futuro y la Fundación Legado Bustillo quiere ser punta de lanza en esa preparación".
Pedro José Martín-Zarco, presidente de la cooperativa, se mostró satisfecho con esta iniciativa conjunta. "Nos plantearon la idea y no tuvimos ningún reparo para firmar este acuerdo de formación", ha subrayado. Aprovechó para ponderar los valores que representa la entidad vitivinícola, que en los últimos años ha diversificado su gama de negocio. "Podemos decir que somos una cooperativa viva, con muchos jóvenes agricultores, muchas incorporaciones y creemos que la formación es muy importante". Dio las gracias a la presidenta de la fundación y avanzó que en breve comenzarán a trabajar y a dar forma a este proyecto entre los técnicos de ambas instituciones.