El presidente provincial y diputado regional de Vox, Luis Blázquez, mostró su rechazo y el de su partido "a la inmigración ilegal, así como de destinar recursos para el acomodo de esos ilegales", en relación a la polémica suscitada por la posible creación de un centro de atención a inmigrants en el aearopuerto de Cuudad Rea.

"Las informaciones que nos llegan por la prensa son confusas, poco claras y en muchas ocasiones contradictorias. Aquí nadie sabía nada, ni el gobierno socialista de Castilla-La Mancha, que es el que tendría que destinar millones de euros para la manutención de los más de 3.000 inmigrantes que vivirían en el aeropuerto (según informaciones periodísticas); ni el alcalde de Ciudad Real o su concejal de Urbanismo, que deberían dar su consentimiento a las obras de reforma de las instalaciones aeroportuarias para adecuarlas al nuevo uso que le quieren dar".

Blázquez pone en duda "esa supuesta ignorancia, ya que tantos miles de personas requieren de una logística y unos fondos económicos muy elevados que no pueden ser obviados". Para el presidente provincial de Vox, "el enfado escenificado por los dirigentes del PSOE y del PP es más cara a la galería que una oposición firme a la llegada de inmigrantes ilegales al aeropuerto".

"Tanto PP como el PSOE se pusieron de acuerdo para el reparto de inmigrantes ilegales por toda España, como forma de repartir el problema entre todos en vez de aportar una solución al mismo. Ahora simplemente dicen que el aeropuerto no es un sitio adecuado para los inmigrantes.

Blázquez indica que el alcalde de Ciudad Real se reunió con diferentes asociaciones de empresarios "y para decir que no les parece bien meter a los ilegales en el aeropuerto porque no reúne las condiciones adecuadas para tal fin, pero ¿Si el gobierno de Sánchez mete a esos 3.000 inmigrantes ilegales en todos los hoteles de la ciudad y pueblos cercanos? ¿Eso sí le parecería bien? Los hoteles sí tienen las condiciones adecuadas para que las personas vivan en ellos y según lo publicado en las cuentas sociales oficiales del ayuntamiento, eso es lo único que preocupa a socialistas y populares", se pregunta Blázquez. 

"Nosotros estamos frontalmente en contra de la inmigración ilegal. Exigimos la expulsión inmediata de todo el que entre ilegalmente en nuestro país. Pedimos que se deje de financiar a la multitud de entidades que viven de la industria de la inmigración ilegal, ayudando así a desmantelar otro de los grandes negocios de hoy en día: las mafias de la trata de personas".