Todos los discursos dedicados al Día Internacional de la Mujer coinciden en la educación como institución social imprescindible para erradicar la discriminación de género en el resto de ámbitos de la vida cotidiana. El trabajo de la educación familiar lo complementan los docentes que enseñan a los jóvenes que serán el futuro del desarrollo de ciudades y municipios. Esta labor se ve reforzada por la implicación de sindicatos educativos como ANPE, que hoy, aprovecha este día para reivindicar la importancia de «elementos en las aulas que promuevan el empoderamiento de las mujeres y la violencia de género» explica Mónica Sánchez de la Nieta, presidenta provincial del sindicato independiente. Asegura, que el trabajo desde el feminismo «ayuda a crear un ambiente educativo más inclusivo, equitativo y respetuoso con la diversidad de género» y, así, «fomentar la conciencia crítica y promover el respeto», aclara.

Para el completo desarrollo de esta concepción educativa, la Consejería de Educación ha desarrollado un documento Orientaciones para el diseño y desarrollo del Plan de Igualdad y Convivencia,  destaca Nieto, «que sirve como material de apoyo para la elaboración, desarrollo, revisión y evaluación en los centros educativos" y que "propone actuaciones e intervenciones para el fomento de una convivencia positiva, bajo los principios de la coeducación».

Por su parte, el personal docente goza, tal y como explica la presidenta, de un escenario equitativo en cuanto a brecha de género, puesto que, «según el Ministerio de Educación, el 67,2% del profesorado está conformado por mujeres. En las enseñanzas de régimen general no universitarias, este porcentaje se eleva hasta el 72,4%, más de dos puntos por encima del registrado diez años atrás», y celebra estos datos tan «significativos». 

En el entorno educativo, fuera del aula, «los jóvenes tienen una forma diversa y compleja» de entender conceptos como el feminismo y la igualdad, «y probablemente evolucionará según adquieran más conocimiento y experiencia». Así, la educación visualiza un horizonte positivo en materia de igualdad. Este 8 de marzo, ANPE «se compromete con una educación y una sociedad libres de desigualdades de género en las que el respeto, y la equidad sean valores sobre los que construir un futuro».