El aumento de los casos de sarampión respecto al año pasado ha hecho que se enciendan todas las alertas: 110 expedientes en lo que va de 2025, mientras que en todo 2024 hubo 217. Pese al impacto que pueda causar este repunte de una enfermedad que se considera erradicada, los expertos en patologías infecciosas y vacunas quieren mandar un mensaje de tranquilidad. La investigadora Noemí López, del Centro Nacional de Epidemiología-Instituto de Salud Carlos III (CNE-ISCIII), precisa que se trata de una situación «esperable en un contexto de post-eliminación» del virus.
Según explica López, este incremento no implica la pérdida de la «situación de eliminación» que la Organización Mundial de la Salud (OMS) otorgó a España en 2016 después de acreditar que no había existido una transmisión endémica del patógeno en el país en los dos años anteriores, algo que no ha cambiado hasta la actualidad.
La investigadora apunta que 41 de los 110 casos confirmados tienen su origen en un brote en el País Vasco, que se ha producido entre la comunidad y ha impactado también en un hospital, un entorno donde se tiende a amplificarse la difusión de la transmisión. Asimismo, indica que estos contagios, de forma habitual, se están desarrollando en personas adultas.
«Realmente es raro que tengamos casos, como sucede en países de nuestro entorno donde las coberturas de vacunación son más bajas y los más afectados son los pequeños porque las vacunaciones son peores que las nuestras. Nosotros ahora mismo estamos atendiendo a un sarampión que es el esperable en un contexto de post-eliminación. Está afectando generalmente a los grupos etarios relativamente susceptibles que no pudieron tener el sarampión porque no había circulación de este y tampoco había coberturas vacunales suficientemente altas como para poderles proteger», detalla.
López concreta que estos grupos susceptibles debido a la baja protección comprenden aquellas personas nacidas entre 1978 y 1987, según refleja el 2º Estudio de Seroprevalencia publicado en 2020. «Antes se manejaban datos de que los nacidos en 1971 y posteriores eran los más susceptibles (...), pero los datos del estudio han demostrado que las cohortes entre 1968 y 1977 muestran una seroprotección de más del 98 por ciento y es a partir de los nacidos entre el 78 y el 87 los que tienen unas coberturas un poquito más bajas. Esos son los susceptibles», destaca. A este respecto, añade que «no es de esperar» que el sarampión se transmita en niños pequeños debido a que es un grupo «bien» vacunado. En caso de que se produzca esta situación, se debería a problemas de acceso al sistema sanitario o problemas de reticencia vacunal, un factor que se ha observado de forma puntual en niños que proceden de otro país y no han estado dentro del sistema de salud.
Por su parte, el pediatra, portavoz y vocal sénior de la Asociación Española de Vacunología (AEV), Fernando Moraga-Llop, señala que, aunque el porcentaje medio de administración de la primera dosis de la vacuna en España en 2023, últimos datos disponibles, alcance el 97,8 por ciento, hay cuatro comunidades que se sitúan en el 95 por ciento, mientras que en la segunda dosis hay en total 11 autonomías por debajo de este 95.