El Caserío Ciudad Real tiene este domingo la oportunidad de cerrar una semana inolvidable. Los pupilos de Santi Urdiales visitan (12 horas. Pabellón Ángel Nieto. Arbitraje de Gutiérrez Sobrino y Monjo Ortega) al Zamora, colista de la División de Honor Plata, en la jornada 24 y antes del parón de la Semana Santa. Los amarillos llegan a este choque pletóricos de moral tras eliminar en la segunda ronda de la Copa del Rey al Atlético Valladolid, su segunda víctima de la Liga Asobal en este torneo. Ahora bien, Santi urdiales, técnico del Caserío, es prudente y recuerda que la prioridad es la Liga, donde está a un paso de certificar su pase a la fase de ascenso, sin olvidar la opción incluso del ascenso directo, en función de lo que hagan sus rivales directos en los partidos Burgos-Ibiza y Guadalajara-Antequera.
Nico Barceló, Nico Ayúcar, Martín Santano, Juan Lumbreras y Víctor Morales serán baja para este choque.
Además de estas ausencias, la gran preocupación de Santi Urdiales es el tremendo desgaste acumulado por sus jugadores tras el esfuerzo del pasado martes en la Copa del Rey. "Fue un partido muy intenso, con 10 minutos extra y cuando nos vimos con opciones alargamos rotaciones, así que algunos jugadores tuvieron que estar más tiempo en la pista de lo que habíamos previsto. A ver cómo asimilamos este esfuerzo para ir a Zamora como hicimos en la segunda parte ante el Valladolid, es decir, a vida o muerte".
El santanderino exigió tener los cinco sentidos "en la Liga, pues estamos muy cerca de clasificarnos para la fase de ascenso. Tenemos un calendario durísimo y lo más importante ahora es lograr los dos puntos de Zamora".
El Zamora es colista de la tabla con 7 puntos, aunque ha sido capaz de puntuar ante conjuntos como Antequera y Cisne y poner en serios apuros al Guadalajara y al Burgos, por lo que los jugadores del Caserío ya están advertidos de que deberán ofrecer su mejor versión para llevarse el triunfo.