El próximo lunes 11 de septiembre arrancará la vuelta al 'cole'. Se trata siempre de la fecha clave que marca el regreso a la rutina tras las vacaciones de verano tanto para los alumnos como para los docentes y en esa vuelta a las aulas destaca una preocupación por encima de otras y que señalan los sindicatos: la bajada de la natalidad.
La disminución del número de estudiantes de Infantil y de Primaria se viene haciendo notar en los centros y de cara a este curso los sindicatos prevén que sea todavía más visible, dado que los niños que se incorporan por primera vez al sistema educativo, los de tres años, son los que nacieron en 2020, es decir, el año de la pandemia, lo que se tradujo también en un nuevo golpe a la natalidad. Así lo expuso a este diario Fernando Villalba, del sindicato STE, quien advirtió que eso puede derivar «en el cierre de unidades de educación» y poner también en riesgo algunas escuelas rurales de la provincia.
A falta de los datos de alumnos que ofrecerá esta semana la Consejería de Educación, las cifras del INE ya constatan una bajada importante. En concreto, en el año 2022 había en la provincia 3.800 niños de tres años, mientras que en 2012, justo una década antes, eran 5.583. Un 30 por ciento menos. Ese desplome puede traducirse en este curso en que tan solo haya 3.200 niños de nuevo ingreso en la provincia, atendiendo a las cifras de admisión de alumnos de la provincia que publica la propia Junta. De hecho, según esos datos, ha habido peticiones de escolarización en 80 pueblos, pero no así en los 22 municipios restantes, aunque en siete de ellos sólo se registró una solicitud de nuevo ingreso.
Esto no quiere decir, matizó Villalba, que el cómputo total de alumnos del sistema educativo se reduzca de manera exagerada en este curso, sobre todo porque la administración autonómica, destacó, se está haciendo «un gran esfuerzo en la FP», impulsando nuevos ciclos gracias también al apoyo de Europa. Esos jóvenes que antes eran 'ninis' y que abandonaban el sistema educativo, encuentran ahora una puerta para seguir y formarse en un ámbito profesional determinado.
Sin embargo, el foco de la preocupación está claro: la bajada de la natalidad y la escasez de alumnos de nuevo ingreso. Como muestra un botón: para este curso 2023-2024 se ofertaron en la capital 704 plazas de nuevo ingreso y, sin embargo, sólo se recibieron 509 peticiones. «La bajada de la natalidad es brutal», reconoció el pasado mes de junio el delegado provincial de Educación, José Caro.
adoptar medidas. «La natalidad sigue disminuyendo y en nuestra provincia, sobre todo. Hay otras provincias de Castilla-La Mancha que tienen la suerte de abrir centros y de aumentar unidades, pero en Ciudad Real no es así. Hemos visto a la hora de la admisión del alumnado cómo en zonas de Ciudad Real sigue disminuyendo y es el momento para considerar el llevar a cabo más bajada de ratio y desdobles que serían buenos», afirmó la presidenta del sindicato ANPE en Ciudad Real, Mónica Sánchez de la Nieta. En declaraciones a La Tribuna también señaló que «políticamente tendrán que tomar medidas para motivar a las familias para que tengan hijos y, sobre todo, que haya puestos de trabajo en la provincia para que vengan familias de otras provincias o de otras comunidades autónomas».
Por lo que atañe al ámbito laboral del profesorado, De la Nieta aseguró que será «un año positivo» porque se deben ejecutar medidas acordadas con Educación, como es la bajada de ratios a 22 alumnos en niños de tres y cuatro años. Además, destacó la reducción en una hora en el horario lectivo de 25 a 24 y la necesidad de avanzar para reducir la burocracia que soportan los docentes y para implantar, poco a poco, la figura de la enfermera escolar en los centros que cuentan con alumnos con enfermedades crónicas.
Se trata de aspectos que, sin embargo, no son suficientes para STE. «En Castilla-La Mancha se ha bajado muy poco la ratio y es donde los profesores tienen más horas lectivas de toda España», recordó Villalba. «Se ha bajado la ratio a 22 alumnos y alumnas por aula en Educación Infantil de tres y cuatro años, bajada que es insuficiente para CCOO, que cree que debería generalizarse cuanto antes a todas las etapas educativas y contar con menos ratio en aquellas aulas que tienen mayor diversidad de alumnado», afirma Ana Belén Sanroma.
También en cuanto al profesorado, los sindicatos señalan lo ajustado de las fechas de adjudicación con las que trabaja la Consejería. «Se espera que este viernes, la Consejería adjudique las plazas y vacantes que quedan por cubrir y el 11 de septiembre estén en los centros. Desde CCOO pedimos a la Consejería que, para cursos próximos, se tomen medidas para que el personal docente se incorpore a los centros educativos antes que el alumnado y no el mismo día como ocurrirá este curso escolar».
Asimismo, los sindicatos expusieron que este año se termina de implantar la nueva ley educativa (LOMLOE) en Primaria, Secundaria y Bachillerato en los cursos pares. «Estos cambios normativos suponen una adaptación del profesorado a los nuevos currículos y burocracia que deben asumir», agregaron desde CCOO, mientras lamentaron que «el profesorado de Secundaria sigue sufriendo los recortes de épocas pasadas».
Otro de los aspectos a los que apuntaron los sindicatos en relación con los docentes es la celebración de oposiciones en el cuerpo de Secundaria y profesorado especialista, «que supone que este curso escolar contemos en la provincia con más de 150 docentes en prácticas repartidos por todos los centros de secundaria de la provincia».
Lo que lamentaron en STE es que más que un proceso de estabilización de plazas por méritos ha sido «un proceso de desestabilización» debido a las pocas plazas ofertadas en la región.