Los Celtics se aferran a la épica. Ninguna franquicia en la historia de la NBA ha logrado remontar un 0-3 en una serie de 'playoffs', pero Boston se dio una oportunidad este martes al triunfar por 99-116 en el campo de los Miami Heat, con una lluvia de 18 triples que impidió a los locales blindar su billete para las Finales (1-3).
Con los Denver Nuggets ya a la espera de conocer su rival por el anillo, los Celtics dispararon sus porcentajes desde el arco en el Kaseya Center de Miami y anotaron 19 por los ocho de los Heat para darse una nueva oportunidad y llevar la serie de vuelta al TD Garden. Necesitan sumar otras tres victorias consecutivas para lograr una hazaña sin precedentes en la NBA.
Curiosamente, sí se registró en el béisbol de las Grandes Ligas (MLB) y con los Medias Rojas de Boston como protagonistas. En 2004, remontar un 0-3 en la serie contra los Yanquis de Nueva York y acabaron coronándose campeones.
El balance es de 0-150 para los equipos que iban perdiendo 0-3 en una serie 'playoffs', pero los Celtics lucen un 3-0 en partidos de vida o muerte en esta postemporada y dieron un golpe en la mesa impulsados por 33 puntos, once rebotes y siete asistencias de Jayson Tatum.
El héroe del séptimo partido contra los Philadelphia 76ers, cuando metió 51 puntos, conectó cinco de los 18 triples de unos Celtics que anotaron diez tiros más desde el arco que los Heat.
Los Celtics tiraron por encima del 50 % desde el campo y con un 40 % de acierto desde el perímetro, con 17 puntos de Jaylen Brown, 16 de Derrick White y doce del dominicano Al Horford.
A los Heat se le atragantó el triple (8 de 32) y no les bastó con los 29 puntos, nueve rebotes y cinco asistencias de Jimmy Butler. Gabe Vincent aportó 17 y Caleb Martin, 16, mientras que Bam Adebayo no pasó de los diez puntos, sin anotar en la segunda mitad.
Horford abre el festival
Tras la humillación sufrida en el tercer partido, los Celtics salieron con actitud distinta, más agresivos, más rápidos en las transiciones y más contundentes desde la línea de tres puntos, uno de sus grandes límites vistos en esta serie. Al Horford dio el ejemplo con tres triples en tan solo la primera mitad, White y Grant Williams le siguieron con dos cada uno en unos Celtics que sumaban ya nueve tiros de tres puntos en la primera mitad.
Los porcentajes desde el arco de los Heat, contundentes en estos 'playoffs', bajaron en el Kaseya Center pero aún así su equipo tiró por encima del 50 % desde el campo, liderado por catorce puntos de Caleb Martin (perfecto 6 de 6 en la primera mitad) y once de Gabe Vincent, que también dio una maravillosa asistencia detrás de la espalda para un mate de Bam Adebayo.
Los diez puntos del pívot, quien también hizo daño desde la distancia media, permitieron a los Heat cerrar el segundo cuarto con un 13-6 para mantener seis puntos de ventaja al descanso (56-50).
El tercer cuarto, decisivo para Boston
Un triple de Strus en al apertura del tercer período dio nueve puntos de margen a los Heat en el 61-52, pero la reacción de los Celtics fue contundente.
Sellaron un demoledor parcial de 18-0, impulsado por tres triples consecutivos, dos de Tatum y una de White, para ponerse por delante 70-61.
Y si Butler, al marcar o asistir en 16 puntos seguidos de los Heat, colocó a su equipo a cinco unidades (66-71), los Celtics sellaron el período con un 7-0 para hacerse con nueve puntos de ventaja (88-79).
Tatum anotó catorce puntos y Boston acabó el cuarto con siete de trece desde el arco, números contundentes que dejaron sin respuestas a los Heat por primera vez en esta serie.
Kyle Lowry colocó a Miami a cinco puntos en el (88-83) del cuarto período, pero se quedó en poco más de una anécdota. Un 19-6 de los Celtics, impulsado por un 9-0 impulsado por Tatum, disparó la ventaja de los Celtics hasta el 107-89 que acabó virtualmente con las opciones de los Heat (107-89).
Por si fuera poco, los Heat perdieron a Gabe Martin por un peligroso esguince de tobillo.