El Balonmano Bolaños afronta este sábado (19 horas. Arbitraje de Juncal López y Mateos Alonso) su último desplazamiento de la temporada. El conjunto que entrena Juanmi Fernández visita al Pereda cántabro, equipo que necesita la victoria para lograr la permanencia, ya que es penúltimo con 11 puntos, uno más que el Almassora, que a su vez juega en Pozuelo, noveno con 12 puntos.

Por lo tanto, las bolañegas serán, en parte, jueces de esa lucha por la permanencia. A priori, las manchegas concluirán la Liga en la sexta posición, justo por debajo de la zona de play off de ascenso, pues ya no pueden ascender más puestos y será muy difícil que el Cleba León les arrebate su posición actual, ya que tendrían que ganar sus dos partidos y que las verdiblancas perdieran los suyos.

Por lo tanto, ya sin presión, el Bolaños afronta este encuentro con el objetivo de ofrecer su mejor versión e ir despidiendo una campaña complicada con un buen sabor de boca. En el último partido recibirán en el pabellón Macarena Aguilar al Ikasa Madrid.