Ante el anuncio por parte de la Confederación Hidrográfica del Guadiana de recortar el agua para regar un 10% en la zona del Alto Guadiana en el Régimen de Extracciones para la campaña 2020, los representantes de las ocho Comunidades de Usuarios de Aguas Subterráneas (CUAS) que operan en este área (Lillo-Quintanar, Mancha Occidental I, Mancha Occidental II, Sierra de Altomira, Rus-Valdelobos, Campo de Calatrava, Consuegra-Villacañas y Campo de Montiel, cuyo presidente no pudo acudir en persona por motivos personales), se han reunido en Alcázar de San Juan para mostrar su contrariedad ante una medida «ilógica».
Así lo ha declarado el presidente de la CUAS Rus-Valdelobos, Ruperto Mesas, durante este encuentro en el que se pusieron sobre la mesa la propuesta de la CHG con vistas a la celebración de las reuniones de las Juntas de explotación donde, desde hoy hasta el jueves, se determinarán las medidas restrictivas para el próximo año con base en las determinaciones del último informe del Plan Especial de Sequía. Este, con fecha a 1 de noviembre, declaró a la Unidad Territorial (UTE) 01 Mancha Occidental en estado de emergencia y a la UTE 03 Cigüela-Zánzara en situación de alerta, lo que «conllevará importantes restricciones generalizadas en muchas zonas regantes de la cuenca del Alto Guadiana y la movilización de recursos adicionales como pozos de sequía o la realización de transferencias hídricas», señaló Mesas.
Los representantes de las comunidades de masas subterráneas mantienen que estas medidas, en caso de aplicarse, podrían entrar en vigor en cualquier momento, algo que ven «ilógico» porque su aprobación se produciría durante las juntas que se celebrarán esta semana mientras que el presidente de la CUAS Rus-Valdelobos incidió en que «a día de hoy, existe incertidumbre sobre la evolución del periodo de sequía ya que se prevé un aumento de la pluviometría durante el invierno, además de que los meses venideros no son periodo de riego».
Usuarios de Aguas Subterráneas piden que no haya recortes - Foto: Rueda VillaverdeDesde las comunidades de aguas subterráneas han insistido en la búsqueda de otras soluciones y reivindican alargar las condiciones actuales de dotación, de las que remarcaron que cuentan con restricciones históricas de una media del 60% en algunos casos, hasta la llegada de la próxima primavera. En caso de que se mantenga el estado de emergencia, proponen que la reducción se establezca en solo un 5% frente al 10%.
Por su parte, el presidente de la CUAS Mancha Occidental I, Ángel Bellón, ha mantenido que esta solo es una «de las muchas medidas que se podrían tomar», de las que ha destacado «la necesidad de poner en marcha la tubería de la Llanura Manchega», para lo que ha instado a los ejecutivos nacional y regional a que actúen «con la mayor brevedad posible». Mismo llamamiento ha hecho para la realización de estudios uniformes sobre la situación de las masas de agua subterráneas. Frente a esto, Bellón apunta a que «tenemos que ir de la mano, porque no sirve de nada gastarnos el dinero en estudios individuales que luego, cuando se ponen sobre la mesa, tienen puntos de vista pero no iguales».
ABASTECIMIENTO HUMANO
Ante las condiciones actuales de las masas de agua, la CHG también propone la reducción del 15% de la dotación para abastecimiento humano. Sin embargo, el presidente de la masa de agua Rus-Valdelobos resaltó que esta medida «no es motivo para alarmarse porque las poblaciones cuentan con suficientes recursos almacenados para garantizar la llegada del agua a las mismas».
Usuarios de Aguas Subterráneas piden que no haya recortes - Foto: Rueda VillaverdeAun así, también reclamaron a la CHG respuestas alternativas como reducir el porcentaje de extracción en las masas de agua superficiales y activar «las medidas de ahorro que sean oportunas, además de incentivar una gestión responsable», remarcó Mesas.
En otro orden de cosas, los representantes de las ocho CUAS manifestaron su «apoyo unánime» a la transmisión de agua solicitada para las Tablas de Daimiel desde el trasvase Tajo-Segura y animaron al Gobierno de Castilla-La Mancha a mantenerse en la misma línea.