¿Qué significa Aquí?

Es una emoción distinta porque hasta ahora yo concebía la poesía como un acto de lenguaje fundamental, una manera de expresar distinta de la prosa. Mi poesía era más bien conceptual, algo seca decían algunos y en este libro hay un aire diferente. Surgió en el confinamiento, recogiendo algunos poemas dispersos en los libros y que trataban de mi tierra y mis emociones. En Piedrabuena, mi pueblo, donde pasé el confinamiento, fue donde fueron apareciendo poemas que enseguida me di cuenta de que tenían el temple necesario para formar un libro y el asunto central era mi tierra, mi pueblo, mi gente, lo que quiero y los que me quieren.

Pese a ese sentimiento individual, es un libro de sentimientos comunes. Si se cambia el nombre de su abuelo, podría ser el mío, mis sentimientos.

Podría ser porque las vivencias que tenemos no son tan distintas, quitando pequeños detalles. Mi infancia fueron los años 50, que ya están lejos. De ahí arranca el libro con mis primeros recuerdos y mis experiencias, que no son tan distintas a las de otras personas. Si he logrado transmitirlas bien, que el lenguaje recoja esas emociones sin trastornarlas, se puede decir que he logrado lo que quería, que es transmitirlas de forma limpia y hacer transitivas mis emociones con las emociones del otro. 

¿Por qué llamar Aquí a un libro con unas vivencias tan personales? ¿Por qué no darle un nombre propio?

Es un ‘aquí’ que es concreto, pero al mismo tiempo es amplio. En el castellano antiguo, ‘aquí’ también significaba nosotros y en el lenguaje normal cuando hablas con alguien se dice ‘es que aquí hacemos las cosa así’. Significa ese punto donde yo me quedo y me reconozco como individuo y como persona; donde me reconozco acompañado por unos recuerdos. Ese ‘aquí’ trasciende más del exacto lugar físico y se refiere a un entorno de afectos o de relaciones que generan un lugar donde tú sientes que es tu sitio. 

Dentro de esa idea de pertenencia, Aquí es el primer libro de una nueva editorial, Mahalta ediciones. ¿Qué implica lanzar esta editorial?

La editorial ya va tomando el vuelo. Hemos publicado cuatro libros, uno en la colección Adivinos, Azul de Lunas, de Lola Franco, que es una colección dirigida a personas que están empezando, y otro que es Mahalta Poesía, que es más restringida, pensada con cinco o seis números al año, de personas con cierta trascendencia o peso en el mundo poético. Hay publicados tres números, el primero el mío, que fue una aventura; luego editamos el de Alfonso González-Calero, su segundo libro Aliento; y ahora hemos editado, se presenta el 23 de septiembre, el libro Con Nombre propio, de Presentación Pérez González. 

¿Por qué la poesía está funcionando también en el 2021, más allá de esos libros que lanzan ‘youtubers’ o ‘instagramers’?

Creo que los ‘youtubers’ lo han permitido. En un principio parecía que iba a ser una competencia al libro, pero la poesía es un elemento rápido de transmisión de emociones, de ideas y de gestos. Las redes lo permiten mejor que una novela o una historia larga y ahí han encontrado un hueco perfecto. Hay una distinción entre los jóvenes twitteros y los poetas más clásicos, pero eso se irá diluyendo con el tiempo y lo que eso ha permitido es que unas generaciones nuevas se vayan incorporando al hecho poético, e incorporar la poesía como un medio de expresión, no como algo raro que ven en los libros de texto.