La crítica -
Por Juana Samanes
Continuación de Los tres Mosqueteros: D"Artagnan, esta segunda parte del clásico de Alejandro Dumas, llevado al cine, tiene como protagonista a una de las villanas más atractivas de la literatura: la bella e intrigante Milady De Winter encarnada por la magnífica actriz Eva Green.
Al igual que su película predecesora, la acción se sitúa en el s. XVII, y narra las aventuras de cuatro intrépidos mosqueteros, leales al rey Luis XIII, pero admiradores de su esposa, la reina Ana, lo que les involucrará en un sinfín de conflictos en muchos de los cuales se verá inmersa la espía del cardenal Richelieu, la bella y peligrosa Milady.
Rodada como una gran superproducción, esta segunda entrega es tan espectacular como la primera en su puesta en escena, que recurre a escenarios reales como el Louvre. Asimismo, al igual que la anterior, se toma libertades narrativas con respecto al texto literario, haciendo especial hincapié en un reino dividido por guerras religiosas que enfrentan a católicos contra protestantes. No obstante, están tan bien ejecutadas que, entiendo, no molestaran a los puristas de la novela, ya que se trata de un film muy recomendable para los aficionados al cine de capa y espada. Curiosamente en esta película, como ocurre en la novela, el amor lo mueve todo: desde el que siente D"Artagnan por Constance, hasta el que corroe el alma de Athos o la relación amorosa que empezará Porthos.
Muy trepidante, las intrigas tejidas por Milady poseen mucho atractivo, donde se luce cien por cien Eva Green quien, para dar la talla en las escenas de peleas cuerpo a cuerpo, aprendió con especialistas en artes marciales, algo que le divirtió porque es una amante del cine asiático. Pero, lo que beneficia espectacularmente a este film, y al anterior, es el fantástico reparto lleno de estrellas galas (no falta ninguna) encabezado por Vincent Cassel, Romain Duris, Pio Marmai, Louis Garrell o François Civil, a los que acompañan otros actores de prestigio como Eric Ruf que encarna al cardenal Richelieu, la luxemburguesa Vicky Krieps en el papel de la sufriente reina o la joven Lyna Khoudri, cuyo físico, de inocente belleza, encaja a la perfección con su personaje de Constance, la novia de D"Artagnan.
A pesar de ser más dramática que la anterior, también hay hueco para el humor gracias a Aramis y Porthos, bien encarnados por Romain Duris y Pio Marmai. Pero se agradece que, en unos tiempos actuales en los que hay pocos héroes, encontremos unos hombres que, como han dicho sus guionistas, Alexandre de la Patellière y Matthieu Delaporte, "desafían a la muerte, se baten en duelos y nunca tienen miedo a morir "
Si no vieron la película primigenia, Los Tres mosqueteros: D"Artagnan, les recomiendo que la recuperen. Ahora mismo se encuentra en la oferta de la plataforma Movistar Plus.