Una amplia mayoría de hermanos le auparon a la presidencia de la Hermandad de la Virgen del Prado, a la que llega tras varios años en la anterior junta directiva. Jesús González, un hombre entregado y de profundas convicciones religiosas, inicia su mandato con la voluntad de que las mujeres y los jóvenes adquieran mayor protagonismo en la vida cotidiana de una Hermandad que quiere que esté presente en la ciudad más allá de cada 15 y 22 de agosto.
¿Qué le llevó a optar a la presidencia de la Hermandad de la Virgen del Prado?
Desde muy pequeño he visitado casi a diario a la Virgen del Prado en la Catedral. Mis padres me transmitieron la devoción y la Virgen del Prado ha estado muy presente en los acontecimientos importantes de mi vida. También me inculcaron el amor a Cristo y a la Iglesia. Además junto a un grupo de personas trabajé muchos años en la Junta Directiva de la Hermandad de la Virgen del Prado, primero como tesorero durante ocho años y posteriormente nueve más como vicepresidente. La devoción a la Virgen me ha llevado a optar a ser el primer servidor de su hermandad. También he de confesar que ha tenido un gran peso el apoyo de muchos hermanos y hermanas que me pedían que cogiera el testigo del primer presidente de la hermandad, Francisco Pajarón López, para seguir con la labor.
Salió elegido con una mayoría abrumadora: 152 votos, frente a los 75 del otro candidato. Este respaldo es un orgullo, pero también una responsabilidad, ¿qué mensaje quiere hacer llegar a los integrantes de la Hermandad?
Es un honor para todos los que integramos la candidatura haber recibido el respaldo de un número tan elevado de hermanos, pero a la vez como bien dice es una gran responsabilidad, que con la ayuda de la Virgen y de toda la Ilustre Hermandad confío que podamos todos vivir nuestro sentir cristiano y cofrade como nos invita el Papa Francisco en su última encíclica ‘Fratelli Tutti’ (Hermanos todos), unidos y con ganas de trabajar, tirando todos del mismo carro. La unión es uno de nuestros principales objetivos.
¿Y a los ciudadrealeños?
El mensaje de que sigan siendo testigos del amor a la Virgen y la solicitud de que la visiten cada día más tanto en las aperturas del templo catedralicio como a través de su balcón del Camarín. También quiero transmitirles que siempre tendrán a la Junta de Gobierno de la Hermandad dispuesta a acogerles en las filas de la misma, ya que es una forma explícita de significar ese amor a la Virgen del Prado. Para ello solo tendrían que pedir la solicitud de hermano/a o de aspirante en el caso de menores de 16 años.
Usted conoce bien la Hermandad, ¿qué quiere aportar desde la presidencia?
Creo que debe continuar en la línea marcada durante los últimos nueve años y trabajar para que desde la estabilidad vaya creciendo no sólo en número de hermanos y hermanas, que es fundamental, sino también en sus fines principales marcados en nuestras reglas o estatutos, esto es, vivir intensamente nuestra fe cristiana, potenciar la actividad apostólica que dimana de la fe y fomentar la devoción a la Virgen.
¿A corto plazo qué fines se han marcado?
La hermandad aprobó recientemente la incorporación de la mujer. Todo un hito. Actualmente han ingresado alrededor de medio centenar de mujeres en la hermandad. La pandemia que estamos sufriendo está dificultando que muchas que desean hacerlo hayan podido inscribirse. Por ello, vamos a hacer todo lo que está en nuestras manos para facilitar el ingreso de más hermanas y hermanos. También es indispensable asumir una importante y necesaria obra social o asistencial en cuanto a la caridad dentro de las posibilidades reales de la hermandad. Igualmente vamos a desarrollar de forma conjunta con el Cabildo de la Catedral y la Hermandad de la Corte de Honor los cultos a Santa María del Prado. Las acciones de formación cristiana, juventud, actividades culturales, etc. son otras actuaciones a potenciar, así como adecuar en todo lo posible la estructura organizativa, especialmente de cara a las procesiones de acuerdo con los nuevos estatutos y el Reglamento de Reglas interno.
¿Va a ver alguna mujer en la junta directiva?
Los nuevos estatutos reglan que para que un hermano o hermana pueda pertenecer a la junta de gobierno han de tener en caso de ser vocales un año mínimo de antigüedad de pertenencia en la hermandad y cinco en caso de ostentar cargos de presidente, vicepresidente, secretario, tesorero y mayordomo, razón por la que en la actual junta de gobierno no se ha podido incorporar ninguna mujer. Pero nuestra intención es que una vez que seamos ratificados por el obispo se puedan ir incorporando.
¿Dónde hay que incidir desde su punto de vista?
En la evangelización y el fomento de la participación de todos, especialmente de los jóvenes. La hermandad debe abrirse para lograr la máxima participación de los jóvenes que son el presente y el futuro de la hermandad. Hay un gran grupo de jóvenes fruto del trabajo de la anterior Junta de Gobierno. Son un ejemplo de entrega y testimonio de amor a la Virgen.
¿Qué es para usted el 15 de agosto?
La Virgen lo es todo para nosotros y el 15 de agosto es Ella. En un sentido más social, para mí es el día grande de Ciudad Real porque Santa María del Prado, patrona de la ciudad, se hace presente en medio de sus hijos. También es sentir comunitariamente a la hermandad que manifiesta el amor a la Madre y lo hace ante toda una ciudad que la honra y venera.