El escritor y periodista Manuel Juliá atribuye a la poesía de María Antonia García de León la capacidad de establecer un diálogo con el lector, en el sentido que éste se sienta interpelado por las palabras de la escritora torralbeña, reflexione sobre ellas e incluso llegue a elaborar sus propias variaciones sobre el texto.
Juliá y García de León compartieron ayer mesa en el salón de actos de la Biblioteca Pública de Ciudad Real, donde la segunda presentaba su libro Poemas al ritmo de las estaciones, de los días y del amor, una cuidada edición realizada por la editorial Cuadernos del Laberinto como una primera entrega de su nueva colección Berbiquí.
El responsable de guiar a los espectadores del acto por el sentido de la poesía de García de León detalló que ese diálogo se establece también «con la historia, con la cultura, consigo misma», en beneficio de dicha participación activa del lector.