Jonás Basso se ha afianzado en el eje de la zaga del Club Deportivo Puertollano. El argentino, a sus 22 años, quiere aprovechar la oportunidad que le ha concedido el club industrial en el fútbol español y sólo piensa en mejorar. Su gran rendimiento durante muchos partidos no ha pasado desapercibido para otros clubes, que ya han enviado ojeadores al estadio Ciudad de Puertollano para conocer de cerca las evoluciones de este futbolista.
Él no quiere pensar más allá del CD Puertollano: «Me debo a este club porque es el que me ha dado la oportunidad. Me abrió las puertas del fútbol español desde el primer momento y quiero contribuir y responder a esa confianza que ellos me han dado. Así que me voy a presentar el día 29 al primer entrenamiento con más ganas que nunca».
El argentino, completamente adaptado a la plantilla que entrena Andrés Viñas, es optimista de cara al futuro: «Seremos de los mejores equipos de 2015, estoy seguro. Tenemos muy buen equipo, estamos capacitados y tenemos muchas ganas», aseguró.
Tras cuatro derrotas consecutivas en Liga, Jonás admite que se han marchado de vacaciones con un «sabor amargo. Perdimos el último partido con el Mora de una manera inexplicable y acabamos enojados. El vestuario estaba triste, pero ya tenemos ganas de que llegue el primer entrenamiento y para el próximo partido lo vamos a dar todo. Hay que volver con más ganas e intensidad que nunca para revertir esta situación».
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