La jefa provincial de Tráfico, Raquel García Fabra, asegura que la capital y la provincia han vivido una situación «privilegiada» respecto del resto de España en cuanto al calendario de exámenes de conducir, pero esta coyuntura puede cambiar porque la Jefatura se está planteando una serie de cambios organizativos en sintonía con el resto de provincias, de tal modo que se perderían «esos privilegios». Un aviso que guarda relación con las últimas declaraciones de la Asociación Provincial de Autoescuelas que amenaza con movilizarse si no se acaba con la lista de espera.
García Fabra asegura que no existe una lista de espera y responsabiliza a algunas autoescuelas en el sentido de que se han comprometido con sus alumnos a que se examinen en una fecha concreta.
Ciudad Real ha gozado de una situación privilegiada, con calendarios a cuatro y cinco meses vista. «Los interesados sabían que día se iban a examinar», pero la situación de crisis económica y otras causas sobrevenidas han hecho que la plantilla de la Jefatura provincial de Tráfico se haya reducido y ahora hay siete examinadores (tres se han jubilado y uno ha fallecido). Una situación que «conocen bien las autoescuelas, como también la norma y el fallo del Tribunal Supremo respecto a la potestad de las jefaturas en cuanto a la fecha de exámenes.
El calendario «es orientativo», subraya la jefa provincial de Tráfico quien añade que las autoescuelas «están avisadas desde septiembre del año pasado, conocen la situación». García Fabra convoca reuniones con las autoescuelas cada tres meses y «la relación es buena». Insiste en que no se puede examinar a todos los que presenten si excede a la oferta que tiene la Jefatura. La Dirección General de Tráfico tiene previsto aumentar las plantillas para el próximo año.