Rubén Gómez no estará este domingo sobre el césped del Nuevo Cerrú para disputar el último partido de Liga con el CD Puertollano. El jugador se encuentra en la fase final de recuperación de la fractura de peroné que sufrió en su pierna izquierda el pasado mes de marzo, pero él mismo reconoce que «es preferible no arriesgar, todavía siento dolor y molestias», y añade que «si nos estuviésemos jugando algo forzaría y me infiltraría para estar con el equipo».

De esta forma, el atacante industrial comienza a pensar en la próxima temporada y mira con especial atención la Asamblea Extraordinaria que celebra mañana el CD Puertollano en la que se decidirá sobre la desaparición de la entidad por culpa de las deudas y el concurso de acreedores, así como por la posibilidad de formar un nuevo proyecto partiendo de cero o unirse al Atlético Puertollano. Sobre este punto, Rubén Gómez se muestra tajante y subraya que «hay que dejarse de egos y, por el bien del fútbol en Puertollano y para el potencial del fútbol base, es mucho mejor unirse; los equipos serían más fuertes aportando cada club sus ideas».

En su caso particular, Rubén Gómez desvela que «me gustaría seguir en Puertollano», por lo que no vería con malos ojos una posible incorporación al conjunto de Primera Preferente del Atlético Puertollano, aunque de momento prefiere no pensar en futuribles para centrarse en la asamblea que celebra mañana el CD Puertollano.